El "miedo" a la "vergüenza" y la "marginación" hace que familias y pacientes tengan "dificultades" para reconocer este padecimiento
SANTANDER, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Universitario Marqués de Valdecilla detecta cada año 100 nuevos casos de psicosis o esquizofrenia, aunque el número de pacientes que reciben tratamiento anualmente por estos trastornos mentales asciende, en estos momentos, a un millar, ya que se trata de "una enfermedad crónica y de larga evolución" lo que hace que los pacientes aumenten periódicamente.
Así lo ha indicado este sábado el profesor de la Unidad de Investigación de Psiquiatría del Instituto para la Formación y la Investigación Marqués de Valdecilla (IFIMAV) y jefe del Servicio de Psiquiatría de Valdecilla, José Luís Vázquez-Barquero, en una entrevista concedida a Europa Press, con motivo de la X Reunión Internacional sobre las Fases Tempranas de las Enfermedades Mentales.
Y es que esta reunión, que se celebra en Santander hasta este sábado, 23 de junio, y que reunirá a más de 200 especialistas e investigadores de "alto nivel" nacional e internacional, se centra en los 'Síntomas negativos o deficitarios de la psicosis' y "especialmente" abordará la esquizofrenia y los trastornos bipolares, según ha detallado Vázquez-Barquero.
Estos síntomas negativos que suelen ser "la inhibición, la apatía, la pérdida de rendimiento, el aislamiento social o las dificultades de comunicación" serán analizados en detalle en esta reunión, que se inaugura esta tarde, porque están dando "especiales dificultades" a los especialistas a la hora de tratarlos.
"Estos síntomas deficitarios se están mostrando muy resistentes a los tratamientos, y, por ello, el objetivo de esta reunión es analizar la naturaleza de estos síntomas, conocer cuál es su causa y cuáles son sus características para, después, tratar de descubrir qué tratamiento, de entre con los que hay hoy en día, es más eficaz y efectivo", ha explicado Vázquez-Barquero.
Sobre la enfermedad mental de la psicosis, el jefe del Servicio de Psiquiatría de Valdecilla ha destacado que "el papel de la familia es esencial y básico", ya que el 90 por ciento de los pacientes viven con sus familias. Y es que este trastorno suele manifestarse entre los 18 y los 25 años, una edad en la que "aún no se han alcanzado los niveles de autonomía e independencia social", ha dicho.
"Que las familias estén involucradas y participen de manera activa en los diferentes procesos del tratamiento psicológico es esencial" y, por ello, ha hecho hincapié en que, en Valdecilla, los programas de tratamiento no sólo están dirigidos a los pacientes sino también a sus familias.
DETECTAR LA ENFERMEDAD
Además, el núcleo familiar también juega un papel "importante" a la hora de detectar esta enfermedad psicológica que, comúnmente, comienza a manifestar con "cambios notables y típicos" como "experiencias de delirio, alucinaciones y percepciones falsas de la realidad" lo que provoca "angustia y agitación" en el enfermo.
Sin embargo, en ocasiones, los síntomas primarios de la psicosis o la esquizofrenia pueden ser "más sutiles" y, por lo tanto, "más difíciles de identificar", como "procesos graduales de aislamiento, deterioro, ligeros cambios de conducta, abandono de las compañías y consumo de sustancias tóxicas e ilegales".
Unos síntomas que pueden ser "muy negativos" si no se detectan a tiempo. Y es que, según Vázquez-Barquero, "incluso en un sistema sanitario avanzado como el nuestro, pasa un periodo largo desde que se inicia la enfermedad hasta que está reconocida por la familia y el paciente y se solicita el tratamiento".
Pero el reconocimiento de que se tiene o de que un familiar tiene una enfermedad mental grave "no es fácil", ya que, por lo general, la familia suele sentir "perplejidad, angustia y una tendencia a rechazar" este padecimiento, una actitud que se da debido al "estigma" social que supone tener una enfermedad mental y recibir tratamiento psiquiátrico".
"El miedo a la vergüenza y a la marginación hacen que la familia tenga dificultades para reconocer la enfermedad e, incluso, tenga tendencia a negarlo como mecanismo de protección", ha señalado el jefe de Servicio de Valdecilla.