Cantabria.-El Servicio de Psiquiatría de Valdecilla atendió 312 casos de trastornos alimentarios en los dos últimos años

Miembros Del Servicio De Psiquiatría De Valdecilla Con Carlos León
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 23 mayo 2012 18:08

A un 17,7% de los pacientes atendidos se les diagnosticó anorexia nerviosa y a un 15% bulimia


SANTANDER, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El Servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla (HUMV) atendió en los dos últimos años 312 casos de trastornos alimentarios, de los que un 2,3 por ciento precisaron el ingreso total del paciente y un 7,5% el parcial.

El perfil del paciente en Cantabria es una mujer (84%) que ha iniciado la enfermedad entre los 18 y 19 años, con el denominado "diagnóstico no identificado", al no cumplir los "criterios totales" de anorexia y bulimia, según los datos aportados por uno de los integrantes del Servicio de Psiquiatría del HUMV, el médico adjunto José Andrés Gómez del Barrio en la presentación de la Guía de Prevención de los Trastornos de la Conducta Alimentaria y el Sobrepeso que han editado.

En el resto de pacientes tratados, de los que en 18 de los casos desviados al Servicio se concretó que no sufrían trastorno alimentarios, a un 44 por ciento se le diagnostico el denominado "trastorno por atracón" --"de reciente definición"--, a un 17,7% anorexia nerviosa y un 15 bulimia nerviosa.

Ante estos datos, el jefe del Servicio de Psiquiatría del HUMV, José Luis Vázquez Barquero, ha justificado el hecho de que el porcentaje "más importante" de los diagnósticos realizados sean "no identificados" se debe a una detección y diagnóstico "muy temprano", una cuestión en la que --ha dicho-- Cantabria está "muy alerta".

Según el Servicio de Psiquiatría del HUMV, el "tiempo de demora" entre la aparición de los síntomas en el paciente y su visita al médico y, posterior diagnóstico, es de 10 meses en el caso de la anorexia nerviosa y de 18,5 meses en la bulimia nerviosa.

Gómez del Barrio y Vázquez Barquero han advertido de que, aunque "parece poco", y es menor que el que se da en otros países y comunidades autónomas, es todavía "bastante elevado".

Por otra parte, el médico adjunto del Servicio de Psiquiatría ha reconocido que los pacientes con trastornos alimentarios tienen una "alta tasa de recaída" y las "mejoras a corto plazo son muy escasas". Además, ha añadido que en este tipo de patologías el porcentaje de abandonos del tratamiento es "muy importantes".

Por su parte, Vázquez Barquero ha subrayado que, en general, la detección precoz de estas enfermedades permiten que "la evolución sea mejor".

Sin embargo, Gómez del Barrio ha añadido que en el Servicio han visto recuperarse a personas que sufrían la enfermedad desde hace 30 años y han conseguido mejorar por lo que ha insistido en que una detección más tardía "no es sinónimo" de que la patología no se pueda curar.

De los 312 pacientes que ha atendido el Servicio de Psiquiatría en estos dos últimos años, cuyas edades han comprendido entre los 11 y los 67 años, 212 de ellos "nunca habían sido tratados" por esta enfermedad.

Ambos facultativos se han referido a la evolución en el número de casos en las tres últimas décadas, cuando comenzaron a aparecer "casos muy aislados" hasta la actualidad, cuando el número de pacientes se ha llegado a "multiplicar por 10".

A la presentación de la guía ha asistido el director general de Ordenación y Atención Sanitaria, Carlos León, quien ha abogado por una mayor colaboración de los ámbitos social y sanitario en el abordaje de estas enfermedades y en su prevención.

Ha reiterado que hay que coordinar los recursos de los que se dispone, tanto para pacientes agudos, semiagudos y crónicos.

Vázquez Barquero ha apostado por un "trabajo multidisciplinar", con "intensificación de cuidados" aprovechando los recursos de los que se disponen.

LA GUÍA

Según han explicado los profesionales del Servicio de Psiquiatría, con esta guía aporta como "novedad" que se llama a un "abordaje" de estos trastornos alimentarios no sólo desde un ámbito "puramente asistencial", sino también fuera de él y en otros entornos, como el escolar.

Así la guía pretende ser un "nexo" entre los profesionales sanitarios y los educadores.

Además de recoger preguntas frecuentes sobre estos trastornos de la conducta alimentaria y el sobrepeso --qué son, por qué se producen, qué tratamiento tienen o la importancia de la detección precoz--, la guía ofrece la clave para desarrollar un programa de prevención en los centros escolares dirigido a alumnos de Secundaria, con una metodología a desarrollar y modelos de sesiones de trabajo.