Los bebés que nacen antes de las semana 25 de gestación tienen riesgos graves de desarrollo neurológico

Una Enfermera Atiende A Un Bebé En Una Incubadora
EUROPA PRESS/JUNTA DE ANDALUCÍA
Actualizado: martes, 27 agosto 2013 11:46


NUEVA YORK, 27 Ago. (Reuters/EP) -

Los bebés que nacen de forma muy prematura, en la semana 25 de gestación o incluso antes, y logran sobrevivir durante sus primeros años de vida tienen un "riesgo sustancial" de tener un coeficiente intelectual muy bajo y presentan problemas de neurodesarrollo en la infancia, según los resultados de una investigación publicada en 'JAMA Pediatrics'.

En una revisión de nueve estudios previos, un equipo del Departamento de Medicina Neonatal del Hospital de Ottawa en Ontario (Canadá) observaron que entre el 24 y 43 por ciento de los bebés extremadamente prematuros presentaban una insuficiencia neurológica de moderada a grave, dependiendo del tiempo que hubieran pasado en el útero materno.

Los bebés suelen nacer tras un periodo de gestación de 37 a 42 semanas, pero las 22 semanas siempre se ha considerado el límite para que un bebé pueda nacer con una mínima oportunidad de sobrevivir. Sin embargo, las probabilidades son demasiado bajas y los riesgos demasiado altos, lo que hace que algunos hospitales no puedan siquiera ofrecer la asistencia adecuada para bebés prematuros de entre 22 a 23 semanas.

En cambio, tras 25 semanas en el útero materno hay expertos que creen que las posibilidades de que un bebé sobreviva y pase a llevar una vida significativamente mejor son mayores.

Para constatar el riesgo en cada caso y poder informar adecuadamente a los padres de los menores sobre los riesgos, los investigadores recopilaron los resultados de nueve estudios que analizaban a niños nacidos entre la semana 22 y 25 de gestación cuando estos tenían entre 4 y 8 años. La mayoría de los estudios se realizaron en Europa y englobaron un total de casi 900 niños.

En general, observaron como estos niños tienen más riesgo de sufrir problemas de desarrollo neurológico, si bien dichos riesgos se van reduciendo por cada semana adicional en el útero.

Así, entre los bebés nacidos tras 22 semanas el 43 por ciento sufrían algún tipo de deficiencia, porcentaje que bajaba al 40 por ciento en los nacidos a las 23 semanas, al 28 por ciento en los nacidos a las 24 semanas y al 24 por ciento en quienes nacieron tras 25 semanas de gestación.

El autor de la investigación, Gregory Moore, reconoce que los resultados están condicionados por el pequeño número de niños analizados. "No queremos que estos datos lleven a un médico decir de forma automática que no hay esperanza en estos casos", ha dicho.

De hecho, añade la pediatra Kimberly Noblel, de la Universidad de Columbia en Nueva York (EE.UU), que no participó en el estudio, "a pesar de que hay un número considerable de niños extremadamente prematuros que llegan a desarrollar problemas de desarrollo neurológico, los resultados no son del todo negativos, ya que más de la mitad de los niños analizados no llegan a desarrollar un trastorno de este tipo".