MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las altas temperaturas causan muertes tan rápidas que los pacientes no tienen tiempo de ingresar en el hospital, según pone de manifiesto una investigación realizada por expertos del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid y publicada en el último número del 'European Journal of Public Health', donde destacan la necesidad de realizar campañas de prevención que reduzcan los efectos negativos del calor excesivo sobre la salud de los ciudadanos.
El trabajo, basado en un análisis de las admisiones en el Gregorio Marañón entre 1995 y 2000, indica que la temperatura a partir de la cual la mortalidad se dispara son los 36,5 grados centígrados y que es la misma temperatura a partir de la que aumentan las admisiones hospitalarias. Según precisaron, en los hospitales, se habla de ola de calor cuando la temperatura máxima diaria supera los 36 grados.
Según señaló el investigador del Instituto de Salud Carlos III Julio Díaz, uno de los dos autores del estudio, en declaraciones al Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC) recogidas por Europa Press, "no debemos esperar a que se produzcan las olas de calor", ya que "actuar entre las 48 y 72 horas antes es de vital importancia, sobre todo para los grupos más vulnerables".
Los investigadores estudiaron 49.572 admisiones, cuyos motivos se catalogaron en causas 'orgánicas', enfermedades circulatorias y del sistema respiratorio, según la Clasificación Internacional de Enfermedades (ICD). Este análisis ratifica la importancia para las personas de aclimatarse a las condiciones locales.
AUMENTA LA VISCOSIDAD DE LA SANGRE
"Las altas temperaturas incrementan las plaquetas y glóbulos rojos, la viscosidad sanguínea y el nivel de colesterol durante el estrés térmico, así como la mortalidad por trombosis cerebral y coronaria", explicó Díaz.
Estos estudios han corroborado que las muertes debido a las altas temperaturas son tan rápidas que los pacientes no tienen tiempo de ingresar en el hospital, lo que es mucho más evidente en aquellas muertes producidas por enfermedades circulatorias.
Según los expertos, la explicación está en las características propias de este tipo de patologías. "Este tipo de enfermedades causa, en un corto periodo de tiempo, consecuencias fatales en la salud. Por ello, los pacientes mueren antes de ingresar en el hospital. Otra posible explicación tiene que ver con la no disponibilidad de camas en los centros, lo que potenciaría estas consecuencias", apuntó.
En la actualidad, la mayoría de las ciudades europeas poseen planes de alerta y prevención de temperaturas extremas para evitar muertes, ocuparse de las personas afectadas y activar planes de alerta en los hospitales.