MADRID, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un estudio liderado por una investigadora del Hospital General Yagüe de Burgos ha demostrado que los tics no son un trastorno poco frecuente entre la población infantil en España, ya que hasta uno de cada seis niños (16,86%) presenta alguno de estos movimientos o sonidos repentinos y repetitivos.
Además, y según los resultados que publica el último número de la revista 'Pediatric Neurology', la incidencia es mayor en los niños que en las niñas y suelen desaparecer o disminuir con la edad.
"Los tics son un trastorno muy frecuente", según asegura Esther Cubo, autora principal del estudio, en declaraciones al Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC), recogidas por Europa Press, recordando que, no obstante, "la mayoría son trastornos leves que no tienen repercusión funcional".
Estos trastornos suelen ser hereditarios en el desarrollo tecnológico de la infancia y se caracterizan por movimientos repentinos, repetitivos y estereotipados, con un resultado longitudinal de mejora gradual en la mayoría de los sujetos.
Aunque se han realizado diferentes estudios epidemiológicos, este es el segundo que se hace en España y posee un mayor tamaño poblacional que el primero, que solo registró datos de dos centros escolares.
En concreto, en este trabajo se ha determinado la prevalencia de los trastornos de tic en una muestra de 1.158 escolares en la provincia de Burgos, aunque las cifras, según los autores, son extrapolables al resto de la población española.
Además, en el estudio han observado que mientras en las escuelas ordinarias un 16,86 por ciento de los estudiantes tenían tics, el número ascendía hasta el 20,37 por ciento en los centros de educación especial.
Los expertos analizaron también la existencia de otros trastornos asociados, como el trastorno por déficit de atención, observando que fluctúan y aumentan en un contexto de estrés, como pueden ser problemas en la familia o en la escuela. Además, los diagnósticos más graves fueron tics motores crónicos (6,07%) y síndrome de Tourette (5,26%).
DEBE CONSIDERARSE FRECUENTE PARA DIAGNÓSTICARSE CORRECTAMENTE
"Existe todavía mucho desconocimiento, incluso entre el personal médico, porque se cree que para poder diagnosticar a un paciente con tics tiene que tener asociada coprolalia (insultos, palabras malsonantes)", subraya Cubo, quien insiste en "considerarla frecuente para que se diagnostique correctamente".
Los estudios epidemiológicos señalan que, a medida que van pasando los años, si no desaparecen, disminuyen en cuanto a intensidad y frecuencia. Los trastornos que tienen tics entre sus síntomas son el síndrome de Tourette, trastornos fónicos crónicos, tics transitorios o tics no especificados.
Aunque la causa es todavía desconocida, los expertos señalan que se trata de un trastorno de supresión de movimiento involuntario en el circuito entre los ganglios basales y la corteza motora.
En estudios de neuroimagen funcional se ha comprobado que en las personas con tics hay ciertas áreas del cerebro que están sobreactivadas o no se activan correctamente para suprimir estos movimientos o sonidos involuntarios