MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La braquiterapia es el tratamiento para cáncer de próstata inicial que mejor calidad de vida ofrece a los pacientes con el mismo nivel de curación que el resto de tratamientos, según un estudio nacional, liderado por el jefe de servicio de Oncología Radioterápica del Instituto Catalán de Oncología (ICO), Ferrán Guedea.
Los investigadores han visto que esta técnica ofrece óptimos resultados de supervivencia a cinco años y que es el tratamiento que menos efectos secundarios --impotencia sexual e incontinencia urinaria-- provoca respecto a otros procedimientos para este tipo de tumor, como la prostatectomía y radioterapia.
En este estudio han participado más de 700 pacientes de cáncer de próstata inicial. Los centros encargados de su desarrollo han sido el Instituto Catalán de Oncología (ICO), el Hospital de Bellvitge y el Instituto Municipal de Investigación Médica (IMIM-Hospital del Mar).
RADIACIÓN CONCENTRADA
La braquiterapia consiste en el implante de pequeñas semillas radiactivas (Iodo-125) en el interior de la glándula. De este modo, toda la radiación se concentra en el punto donde está el tumor y la incidencia sobre órganos sanos adyacentes (vejiga y recto) se reduce al mínimo.
Esta técnica, de aplicación ambulatoria, consiste en una inyección, mediante finas de agujas, de a través del perineo y, por ello, no hace falta realizar una incisión quirúrgica. Tras ello, el paciente solo tiene que estar aproximadamente 24 horas ingresado.
El cáncer de próstata es asintomático, por este motivo, los especialistas recomiendan que los varones de más de 50 años o 45, si tienen antecedentes familiares, vayan cada año al urólogo para que les examine la glándula.