Las bebidas energéticas basadas en la cafeína pueden presentar riesgos para la salud

Actualizado: miércoles, 24 septiembre 2008 18:38


WASHINGTON, 24 Sep. (OTR/PRESS) -

Un largo estudio sobre la cafeína realizado por expertos de la Universidad Johns Hopkins ha llegado a la conclusión de que el abuso de las bebidas energéticas que se basan en esta sustancia provoca, a largo plazo, problemas de salud para sus consumidores. Este tipo de bebidas se han ido introduciendo en el mercado desde hace apenas una década pero su consumo es cada vez mayor; por ello, estos científicos han solicitado una mayor regulación en el control y etiquetado de estas bebidas. Así, pretenden que se haga algo parecido que con el tabaco y en los envases de estas bebidas se incluyan advertencias sobre los riesgos que puede suponer su consumo, tanto solas como en combinación con alcohol.

"El contenido de cafeína en este tipo de bebidas varía según la marca, pero en la mayoría de los casos su porcentaje equivale al contenido de 14 latas de Coca-cola", explicó Roland Griffiths, uno de los autores del estudio, quien destacó que se trata de una cantidad de cafeína muy elevada que no causa daños si se trata d un consumo esporádico, pero que sí puede suponer un problema para aquellos que lo consuman habitualmente. En concreto, el estudio se realizó sobre 496 estudiantes de un colegio, de los que el 51 por ciento confesaron haber bebido al menos una lata de este tipo de bebidas. Entre éstos, los resultados que se desprenden del documento señalan que el 29 por ciento de los consumidores presentaron "sacudidas" corporales, el 19 por ciento padecieron "palpitaciones" y el sólo el dos por ciento restante no sufrió 'secuelas'.

Pero lo que más preocupa a los científicos, explicó Griffiths a la revista 'Drug and Alcohol Dependence', en declaraciones recogidas por otr/press, es la capacidad de las bebidas energéticas de enmascarar los síntomas de la intoxicación etílica sin rebajar sus efectos por lo que han pedido a las autoridades que se regula más este mercado, que genera, sólo en Estados Unidos 3,6 millones de euros y con un crecimiento, según la publicación, de más de un 55 por ciento al año. De este modo, denuncian que sin el etiquetaje adecuado los consumidores probablemente no comprenderán si están consumiendo una cantidad razonable de cafeína, por lo que se debería tomar una determinación parecida a la del tabaco, y añadir en las etiquetas las advertencias y los riesgos que pueden correr los consumidores si abusan de estas bebidas y cuales son los efectos si las mezclan con alcohol.

En este sentido, destacan que, además, el consumo de estos productos se realiza en su mayoría por jóvenes. Las campañas publicitarias van dirigidas en especial a este público y promocionan que con estas bebidas los efectos mejoran el estimula el funcionamiento del cerebro y mejoran las 'sensaciones' que producen las diferentes drogas. "El alcohol añade otro nivel de peligro," dice Griffiths, "porque la cafeína en altas dosis puede dar a los usuarios una falsa sensación de bienestar que proporciona el incentivo para, por ejemplo, conducir un coche", lo que supone un gran peligro.

ES UNA ENFERMEDAD

Con este estudio, los expertos quieren dar importancia a los problemas que supone la intoxicación de cafeína, un síndrome incluido en el Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales y la Clasificación Internacional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que se manifiesta en la vida cotidiana de los afectados a través de síntomas como el nerviosismo, la ansiedad, la agitación, el insomnio, el trastorno gastrointestinal, temblores, taquicardias y en algunos casos hasta la muerte.

"Cabe destacar que productos sin receta médica que contienen cafeína requieren la advertencia de etiquetas, sin embargo esto no ocurre en las bebidas energéticas", señala el estudio, en el que los científicos califican este producto como "una puerta de entrada" a las drogas.