GINEBRA, 19 May. (Reuters/EP) -
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, afirmó hoy que, aunque ahora atravesamos un "periodo de gracia" en el avance de la gripe A (H1N1), esta enfermedad sigue suponiendo un "peligro" y hay que permanecer "alerta".
Durante su intervención en el congreso anual de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que se celebra en Ginebra, Ban instó a los directivos de 30 empresas farmacéuticas que trabajen para aumentar la producción de vacunas contra la gripe común estacional mientras desarrollan una vacuna para combatir el virus H1N1.
"Debemos permanecer alerta", dijo Ban en una rueda de prensa. "Puede que estemos en un periodo de gracia con el H1N1, pero seguimos en zona de peligro", subrayó. Por ello, el máximo responsable de Naciones Unidas destacó la importancia de que las farmacéuticas cooperen con los gobiernos de los distintos países para evitar los peores efectos de la nueva gripe, que ya ha causado la muerte de 79 personas y ha infectado a casi 10.000.
"Las asociaciones con el sector privado son absolutamente vitales", dijo ante los representantes de los 193 Estados miembros de la OMS, a los que pidió que piensen en un contexto que vaya más allá de sus fronteras a la hora de responder a la crisis de la gripe.
Hasta hora, la mayoría de las personas que han contraído la nueva gripe han manifestado síntomas leves como fiebre y náuseas, pero las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades como sida o diabetes pueden padecer efectos más graves. Además, el virus podría extenderse más rápidamente cuando en el hemisferio norte comience en otoño la época de la gripe común.
LISTOS PARA FABRICAR VACUNAS
Los participantes en la reunión de hoy en Ginebra aseguraron que están listos para responder al brote de gripe y que esperarán a que se les den instrucciones específicas sobre lo que deben producir. "Nuestras empresas están preparadas para fabricar vacunas contra el H1N1 cuando la OMS lo recomiende", dijo Michael Boyd, de la Federación Internacional de Fabricantes y Asociaciones Farmacéuticas.
Gelmer Leibbrandt, director general de Nobilon, compañía productora de vacunas perteneciente a Schering-Plough, declaró a la agencia de noticias Reuters que seis empresas se han comprometido a entregar a la ONU el 10 por ciento de las vacunas que produzcan, mientras que otras ocho aún no han tomado una decisión al respecto. La directora general de la OMS, Margaret Chan, calificó este gesto como "un compromiso muy serio".
Por su parte, la secretaria estadounidense de Sanidad, Kathleen Sebelius, afirmó que se están tomando medidas enérgicas para incrementar la producción de vacunas para la gripe estacional que posteriormente se podrían convertir en vacunas para una posible pandemia en caso de que fuese necesario.
"Aún existe tanta incertidumbre en relación con este virus que sería realmente prematuro tomar una decisión sobre cuántas personas deberían ser vacunadas, en qué orden, cuántas dosis se necesitarían y en qué momento. Todas esas discusiones todavía se están produciendo", explicó Sebelius.
SOLIDARIDAD
En la Asamblea Mundial de la Salud, que durará una semana, países pobres y ricos tratan de ponerse de acuerdo sobre cómo compartir las muestras de los virus con las empresas farmacéuticas, que las usarán para crear y vender vacunas contra la nueva gripe.
Países en vías de desarrollo como Indonesia han pedido que se limite la capacidad de las compañías fabricantes de medicamentos para patentar muestras de virus y luego vender vacunas a un precio inasequible.
Ban advirtió en Ginebra de que los países pobres con sistemas de atención médica deficientes corren un mayor peligro ante el virus H1N1, por lo que necesitarán la ayuda de los países más ricos. "La solidaridad global debe estar en el corazón de la respuesta del mundo a la crisis. La solidaridad frente a este brote significa que todos deben tener acceso a los medicamentos y vacunas", declaró.
"Significa que hay que compartir las muestras de los virus y los datos, significa que hay que evitar las contraproducentes restricciones sobre el comercio y los viajes", añadió el secretario general de la ONU.
Pero una fuente oficial internacional anónima consideró que habrá problemas porque todos los gobiernos van a intentar garantizar que haya suficientes medicamentos antivirales para sus ciudadanos. "Permitir que los países pobres puedan acceder a los suministros médicos que precisan va a ser una cuestión política y técnica crítica", dijo. "Este asunto requiere de atención política", agregó.
Según el último balance de la OMS, 40 países han informado de casos de nueva gripe, si bien la mayoría se concentran en México, Estados Unidos y Canadá, seguidos por Japón, Reino Unido y España. La directora general de la OMS ha admitido que el virus H1N1 ha llevado al mundo al borde de una pandemia aunque ésta no se ha producido todavía, una situación que corresponde al nivel 5 de alerta en una escala de 6 niveles.
La secretaria estadounidense de Sanidad señaló que durante las últimas 24 horas se ha hablado mucho sobre si sería conveniente pasar al nivel 6 y cuándo habría que declararlo, pero afirmó que esta medida no cambiaría mucho las cosas ya que todas las partes implicadas se están preparando ya para una pandemia.
Si se alcanzase el nivel 6 de alerta, las empresas farmacéuticas entenderían que ya existe una demanda suficiente que justifique la producción de una vacuna contra una pandemia del virus H1N1, que se podría vender mezclada con la vacuna de la gripe común o por separado.
