Los autistas son menos propensos a tomar decisiones irracionales

Actualizado: jueves, 16 octubre 2008 1:34

LONDRES, 15 Oct. (OTR/PRESS) -

Las personas con autismo son menos propensas a tomar decisiones irracionales, y son menos influenciables por los instintos viscerales que las personas normales. Esta es la principal conclusión de una investigación del Centro de Neuroimagen del Wellcome Trust, que ha demostrado que los autistas responden a los problemas de forma similar independientemente de la forma en que se plantee.

Los investigadores partieron de la complejidad que supone la toma de decisiones, en la que participa la intuición y el análisis. El análisis requiere cálculo y un pensamiento mucho más racional, pero más lento. Por el contrario, la intuición es mucho más rápida, pero menos precisa y está basada en los instintos más viscerales.

Además, los estudios anteriores ya habían demostrado que la respuesta a un problema dependía de cómo se planteara este problema (lo que se conoce como 'efecto de elaboración'). Ahora el equipo del Wellcome Trust ha utilizado el 'efecto elaboración' para estudiar la toma de decisiones en las personas con trastornos del espectro autista.

Los participantes en este estudio, debían decidir su forma de participar en un juego en el que se apostaba una suma de dinero. Se les proporcionó 50 libras y se les ofreció dos opciones. La primera consistía en mantener 20 libras mientras que la segunda consistía en jugar el dinero, con un 40% de posibilidades de mantenerlo todo y un 60% de perderlo. Esta versión fue conocida como 'marco de ganancia'.

En otra ocasión a los participantes se les presentaba la versión 'marco de pérdida'. La única diferencia con la primera versión era que esta segunda estaba enunciada en términos de perder dinero: la opción A era perder 30 libras esterlinas de su importe inicial mientras que la opción B se mantenía igual.

PERDER O MANTENER

Los investigadores encontraron que pese a que ambas versiones son iguales, los participantes sin autismo tenían más probabilidades de jugar si la primera opción era "perder" en lugar de "mantener", algo que no ocurría con las personas con trastornos relacionados con el autismo. Según los investigadores, esto sugiere que este último grupo es menos susceptible al 'efecto elaboración', es decir, tiene menos probabilidades de dejarse llevar por emociones incoherentes e irracionales.

"Las personas con autismo tienden a ser más coherentes en su plan de opciones. Quizá si mayor atención al detalle les ayude a la hora de evitar ser influidos por sus emociones", explica el doctor Neil Harrison en el estudio publicado por la revista 'Journal of Neurosciene' y recogido por otr/press.

Pero no todos se muestran igual de optimistas. El doctor Benedetto De Martino señala que "aunque esta atención al detalle y la reducción de la influencia de las emociones durante la toma de decisiones puede ser beneficiosa en algunas situaciones, también puede ser una desventaja en la vida cotidiana".

Este estudio refuerza investigaciones previas que sugieren que la diferencia fundamental en la forma en que las personas con autismo toman las decisiones puede estar en la amígdala, una parte del cerebro que participa en el procesamiento de las emociones. En las personas con autismo, la amígdala es diferente en cuanto a la densidad de sus células nerviosas.

El doctor Harrison cree que su investigación puede desempeñar un papel importante al poner de relieve los puntos fueres de las personas con autismo, en lugar de centrarse en los aspectos negativos de la enfermedad.