VALENCIA, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El aumento del número de dentistas en los últimos 25 años --que casi se ha triplicado-- ha reducido en un 57 por ciento la carga de trabajo de los odontólogos españoles, según los datos dados a conocer con motivo de las XXX Jornadas de la Asociación de Economía de la Salud, que se celebran hasta mañana en Valencia.
Este aumento supone un "serio problema" para los profesionales de un sector en el que la prestación de servicios dentales privados en España facturó en 2009 más de 2.900 millones de euros, un 10% del total del sector sanitario privado del país.
Jaime Pinilla, experto en economía de la salud y profesor de Análisis Económico de la Universidad de Las Palmas, que participó con la conferencia titulada 'Organización y financiación de los servicios de salud oral en España', señaló que sólo en la última década, los dentistas colegiados han aumentado su número en un 130%, y "se espera que en los próximos años sea difícil ejercer de de dentista, con menos de 1.000 habitantes por especialista".
En esta misma mesa intervino Manuel Bravo, catedrático de Odontología de la Universidad de Granada, con la conferencia titulada 'Utilización y demanda de asistencia odontológica en España en los últimos 25 años'. Para Bravo, el "desmesurado" aumento de dentistas responde a cuatro factores principales: la mayor oferta educativa de los años 80; el "fenómeno de la inmigración, durante los años 80 y 90, de dentistas sudamericanos o españoles formados en Sudamérica"; la creación del título de Odontólogo a mediados de los 90, en sustitución del Estomatólogo y la incorporación "aparentemente imparable, de nuevas facultades públicas y privadas de Odontología".
Otro de los aspectos que están cambiando considerablemente el ejercicio de la profesión es la potente incorporación de las aseguradoras privadas en el mercado de la salud oral en los últimos años. "Las aseguradoras no sólo dominan la demanda, sino que están empezando a controlar la oferta mediante un amplio número de dentistas concertados y la entrada en el mercado con su propia red de clínicas dentales", afirmó Jaime Pinilla.
De hecho, la asistencia buco-dental pertenece prácticamente en su totalidad al ámbito privado, cubriendo, según Manuel bravo, "el 90% de las necesidades odontológicas, limitándose las prestaciones del sector público en adultos al diagnóstico y al alivio del dolor mediante la extracción dentaria".
POBLACIÓN INFANTIL
En el caso de la población infantil, en cambio, las comunidades autónomas, siguiendo el ejemplo del País Vasco y Navarra, donde se hace desde los años 90, ya ofrecen un Programa de Atención Dental Infantil, que incluye la asistencia dental a los niños hasta los 15 años. "La sanidad pública no lo incluye en su cartera de servicios porque es muy costoso y se asocia a la estética más que a la salud", declaró Pinilla.
En este sentido, Bravo sostuvo que es necesaria la incorporación progresiva de prestaciones públicas en el ámbito de la Odontología y destacó que las técnicas odontológicas más habituales en prevención (selladores de fisuras, fluoruros, etc.) "muestran un elevado nivel de evidencia científica y de rentabilidad, lo que abunda aún más en la conveniencia de que estas medidas se extiendan a toda la población". "Además, en una situación de exceso de odontólogos podría ser una solución al paro que hay ahora en este sector", apuntó.
Para Pinilla, no obstante, las comunidades autónomas están llevando a cabo proyectos muy costosos que, en su opinión, "no resultan ser, a la postre, más eficaces para la salud dental de los niños que lo que ya existía". Este experto en economía de la salud indicó que las claves de una buena salud dental están en la educación y la renta de las familias. "Los recursos sanitarios, por muy nuevos y equipados que estén, no sirven de nada si no se educa a los niños en la importancia de la salud oral y si las familias no pueden permitírselos", afirma.