La Audiencia Nacional archiva el caso del envenenamiento masivo por un jarabe para la tos en Panamá

Actualizado: martes, 19 julio 2011 21:19

MADRID 19 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Nacional ha archivado el caso del envenenamiento masivo por un jarabe para la tos en Panamá, que causó la muerte a más de un centenar de personas, tras confirmar un auto previo del pasado mes de abril en el que se acordó el sobreseimiento provisional de la causa.

El auto de la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, recogido por Europa Press, desestima así el recurso presentado por Caja de Seguro Social de Panamá y algunos de los afectados, que acusaban a la empresa española Rasfer Internacional de haber servido a la compañía panameña Comercial Medicom una partida de glicerina, importada de China, de uso industrial en lugar de la de uso farmacológico, "obviando la obligación de efectuar el adecuado control de calidad", con el conocimiento de la Agencia Española del Medicamento.

Los magistrados, sin embargo, consideran probado que "el producto no fue objeto de manipulación o sustitución desde su origen hasta su destino y que, por otro lado, lo que se ha manipulado en Panamá es el etiquetado, y no sólo la caducidad sino nada menos que la denominación del producto", lo que consideran "la causa real del envenenamiento masivo".

Por ello, exculpan a la compañía española de haber manipulado en producto a sabiendas y confirman que "ha quedado acreditado que lo que llegó a Panamá, y así lo supo en todo momento la comercial panameña, era glicerina de uso industrial y fue la comercial panameña la que llevó a cabo una actuación falsaria para que la caja de Seguro Social la adquiriera como glicerina para farmacopea. Esta es la causa objetiva del envenenamiento habido en Panamá y no otra", insiste el auto.

Además, lo magistrados encuentran que "llama poderosamente la atención que se pretenda, nada más y nada menos, que vincular a la Administración española en una actividad delictiva llevada a cabo en el territorio de Panamá y por una concreta actuación de una empresa panameña, única responsable de que la glicerina de uso industrial se mezclara con otros productos para la elaboración de un fármaco".

Los 9.000 kilos de glicerina fueron destinados en Panamá a la elaboración de un jarabe para la tos que la Caja de Seguro Social distribuyó entre los ciudadanos, lo que causó más de un centenar de fallecidos. Esta glicerina contenía dietilenglicol, un alcohol utilizado como refrigerante y líquido para frenos.