OVIEDO 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ex presidente del Gobierno del Principado de Asturias, Juan Luis Rodríguez-Vigil, recomendó este jueves al Ejecutivo asturiano a reordenar "racionalmente", con "urgencia" y "muy profundamente" el mapa sanitario asturiano y reducir áreas, algo que considera se puede hacer "sin que el ciudadano note ninguna pérdida de calidad asistencial.
"Hay mucho michelín que cortar. Lógicamente alguien se quejará, pero que no sean los ciudadanos enfermos", remarcó al tiempo que reconoció que "hay muchos intereses que tienen que rendirse ante el interés principal, que es el del ciudadano". Así lo dijo a los medios antes de participar en las jornadas 'El futuro del Sistema Sanitario Público en Asturias' que organiza el Consejo Económico y Social de Asturias (CES) en Oviedo para abordar la sostenibilidad del sistema.
Rodríguez-Vigil ofreció una ponencia titulada 'Indertidumbres y seguridades de cara al futuro de la sanidad pública en Asturias'. Al respecto, resaltó que el 20% de los ingresos fiscales "ha desaparecido" y esta situación no será puntal sino "de cuatro o cinco años". "No se puede recurrir a deuda y por tanto hay que reordenar", afirmó.
El ex presidente incidió en que es fundamental reorganizar el sistema, al entender que carece de sentido tener ocho áreas sanitarias o el funcionamiento de una red de hospitales autónomos "sin conexión" entre ellos. "Hay un sistema de comunicaciones que facilita los traslados y las atenciones en distintos sitios de la región adecuadas a las necesidades de cada paciente. Eso se puede hacer, se debe hacer y puede ahorrar mucho dinero", argumentó.
Para Rodríguez-Vigil el cambio "había que haberlo hecho en tiempos de bonanza y ahora hay que hacerlo en tiempos de crisis". "No es solo una cuestión que venga obligada por la crisis. El mapa sanitario de 1984 está absolutamente desfasado y hay que reorganizarlo a fondo", defendió quien también fue consejero de Sanidad y Seguridad Social del Principado.
Respecto al copago, se mostró favorable a ese modelo especialmente para el gasto farmacéutico, aunque sostiene que se trata de un debate que debe hacerse en el ámbito nacional. "Hay muchos pensionistas que tienen unos ingresos muy superiores a gente que trabajan, y por tanto no veo porqué van a estar eximidos del copago", apuntó remarcando que el propósito principal del copago es "evitar abusos y frecuentaciones innecesarias". "Los médicos de Primaria no pueden ser asistentes sociales", añadió.
Por su parte, el consultor y autor del estudio 'Futuro del sistema sanitario público del Principado de Asturias', Francisco Javier Elola, se mostró contrario al sistema de copago ya que considera que se trata de una medida de recorte "pero no una medida de racionalización del sistema", dijo.
Elola sí defendió la reordenación del mapa sanitario, apostando por la regionalización con tres subsistemas liderados por San Agustín, Cabueñes y el HUCA como centros de cabecera especializados, mientras que los hospitales locales tendrían una función "más integrada con Atención Primaria". De este modo, sostiene que se iría hacia un modelo "multidisciplinar e integrado".
Para el experto, la fórmula de la regionalización mejora la sostenibilidad económica y ofrecer mayores garantías de calidad y seguridad para el paciente. "A mayor volumen de actividad hay más seguridad, menor mortalidad y menores complicaciones", aseveró.