MADRID 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
Mañana se pondrá en marcha en Oviedo una campaña de concienciación contra el tabaquismo con el lanzamiento de la IV Carrera sin Humos, en coincidencia con la celebración del XII Congreso Anual de ASTURPAR, promovida por la Fundación AIRE, en colaboración con el Ayuntamiento de Oviedo y GlaxoSmithKline (GSK).
Desde la organización pretenden llamar la atención sobre el perjuicio del hábito que es "la primera causa de muerte evitable" que provoca en España 60.000 defunciones por año. Para ello, la Carrera sin Humos, de dos kilómetros de recorrido, se lanzará a partir de las 20 horas desde el Palacio de los Congresos 'Príncipe Felipe' por las calles de Oviedo bajo el lema "Otro aire es posible".
El doctor José Luis Díez Jarilla, presidente de la Sociedad Asturiana de Patología Respiratoria (ASTURPAR), explicó que la intención de la actividad es "concienciar, recalcar, sensibilizar y mostrar a los ciudadanos que existen otras formas de respirar y de pasar el tiempo en lugar de fumar".
Paralelamente, se desarrollará la XII edición del Congreso Anual de ASTURPAR que convoca a neumólogos, cirujanos torácicos y otros profesionales sanitarios asturianos, para abordar temas como el tratamiento y el diagnóstico del cáncer de pulmón, la ventilación mecánica en el paciente con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), las pruebas de función pulmonar, el asma y el deporte, y las nuevas evidencias de la EPOC.
TABAQUISMO.
Los promotores de la iniciativa llaman la atención sobre el hábito que, además de las muertes, ocasiona el "sufrimiento de los enfermos y de sus familias", un "perjuicio económico" y también "indignación" porque "gran parte de las muertes se pueden evitar con el abandono del tabaco", según manifiesta Díez Jarilla.
Lo que hoy es considerado como "una enfermedad crónica adictiva", es la causa fundamental de enfermedades graves como los cánceres de pulmón, laringe, vejiga y esófago, las afecciones cardiovasculares y la EPOC.
Por otra parte, el especialista se mostró satisfecho con la ley anti-tabaco que ha hecho descender el tabaquismo y el consumo medio de cigarrillos en el 2007. A su vez, la norma "ha dejado ver sus efectos respecto al humo ambiental" que "se ha reducido en un 85 por ciento".
Si bien Díez Jarilla acepta que los datos "son satisfactorios", cree que "hay que continuar con las actividades de concienciación" porque "todavía existe un amplio grupo de personas que mantienen este hábito", sobre todo entre las de 25 a 44 años.