VALENCIA, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
Cirujanos pediátricos del Hospital Universitari i Politècnic La Fe de Valencia advierten del peligro que entraña para los niños menores de tres años comer frutos secos, ya que su reducido tamaño puede causar asfixia o infecciones pulmonares si se queda alojado en el sistema respiratorio. De hecho, la aspiración de cuerpos extraños es la segunda causa de muerte doméstica en niños de 1 a 3 años, ha informado el centro sanitario en un comunicado.
Los frutos secos, utilizados en la elaboración de muchos dulces navideños, no pueden ser tragados correctamente por los niños pequeños puesto que no tienen adecuadamente maduro el aparato deglutor.
"Para ellos es muy fácil que pequeños fragmentos de frutos secos y otros objetos menores de tres centímetros pasen a la vía respiratoria, obstruyendo la entrada del aire y provocando procesos infecciosos o incluso la muerte", explica el doctor Carlos Gutiérrez, del servicio de Ciurgía Pediátrica del Hospital La Fe.
El doctor Gutiérrez insta a los padres y tutores a tener en cuenta lallamada '"Regla del Tres': "prohibido dar objetos de menos de tres centímetros a menores de tres años". Los frutos secos resultan especialmente peligrosos por ajustarse en su mayoría a este tamaño, sin embargo son igualmente perjudiciales todos los objetos que puedan ser aspirados con facilidad debido a sus reducidas dimensiones, como pueden ser pequeños juguetes.
No obstante, "en los juguetes pequeños está debidamente etiquetada su potencial peligrosidad --explica Gutiérrez-- pero hay una total carencia de información en los envases de frutos secos, que de incluirse ayudaría en gran medida a evitar estos accidentes". Los especialistas abogan así por advertir en el etiquetado de los paquetes de frutos secos sobre las restricciones del producto para determinados grupos de edad.
CONCIENCIACIÓN SOCIAL
El servicio de Cirugía Pediátrica de La Fe, dirigido por el doctor Carlos García-Sala, atiende al cabo del año a unos 50 niños con cuerpos extraños alojados en el pulmón y las vías respiratorias, cuyo método de extracción pasa por un delicado procedimiento quirúrgico.
Los especialistas del servicio insisten en la necesidad de concienciar a la población y a las autoridades correspondientes sobre el riesgo que implican para los más pequeños los frutos secos y otros objetos de tamaño similar, advertencia que trasladan especialmente a los colegios y escuelas infantiles que celebran antes de las vacaciones de Navidad la "Fiesta de la Castañera" o de los frutos secos, en la que aprenden a conocer estos productos, que resultan muy beneficiosos únicamente a partir de cierta edad.