ZARAGOZA 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Día Mundial de la Voz, una iniciativa de la Federación Internacional de Sociedades de Otorrinolaringología (IFOS) y la Sociedad Española de Otorrinolaringología (SEORL), se celebra mañana. El evento se centra en la importancia de prevenir los problemas vocales desde la infancia.
Los actos se celebrarán a las 10,30 horas, en el Colegio María Rosa Molas de Zaragoza (calle Vía Ibérica, 25), donde el doctor Rafael Fernández Liesa, miembro de la Sociedad Aragonesa de Otorrinolaringología y vocal de la SEORL, presentará el acto del Día Mundial de la Voz, informará sobre la prevención de los problemas de voz en los niños e impartirá una conferencia sobre "Cómo se ve la voz. Realización de un exploración".
Con un público esencialmente infantil, los actos contarán también con la actuación del coro del Colegio Maria Rosa Molas que, compuesto por 70 niños y niñas, realizará un calentamiento vocal e interpretará algunas canciones bajo la batuta de su directora Virtudes Morcillo.
El Día Mundial de la Voz, que habitualmente se celebra el 16 de abril y que este año se ha retrasado debido a las vacaciones, quiere hacer hincapié este año en la importancia de los problemas de la voz en los niños. Tal y como señala Fernández Liesa, otorrinolaringólogo en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza, "entre el 30 y el 40 por ciento de los niños padecen trastornos de la voz en algún momento, algo más frecuente en los niños que en las niñas, según indican las estadísticas". En los adultos, la edad en que son más frecuentes los problemas vocales se sitúa entre los 25 y los 45 años, con una frecuencia ligeramente superior en las mujeres.
Los profesores de colegio son los profesionales más afectados por las disfonías, con una prevalencia en este colectivo de aproximadamente un 22,5 por ciento. Son muchos más, sin embargo, alrededor del 70 por ciento, quienes padecen diferentes molestias o síntomas relacionados con el uso de la voz. En cuanto a datos de la población total, Rafael Fernández recuerda que el 5 por ciento de la población española "sufre algún trastorno de la voz que requiere la intervención de un otorrinolaringólogo, el especialista que dispone de los conocimientos para la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las patologías relativas a la voz".
Tanto en niños como en adultos, la causa de los trastornos vocales es el mal uso y el abuso vocal, es decir, el esfuerzo vocal excesivo. Estos trastornos se denominan disfonías funcionales, se relacionan con la actividad laboral y adquieren en muchas ocasiones la catalogación de enfermedad profesional. Por otro lado, los nódulos y los pólipos son otro tipo de disfonías llamadas orgánicas, que conllevan la existencia de una lesión en los órganos fonatorios.
"La patología benigna más diagnosticada en relación a las cuerdas vocales es la presencia de nódulos, que se sitúa entre un 17 y un 24 por ciento y se producen de forma habitual entre la segunda y quinta década de la vida y de forma predominante en las mujeres. En los varones, sin embargo, es más frecuente la existencia de pólipos, en una proporción de cuatro a uno con respecto a las mujeres y se producen generalmente entre los treinta y los sesenta años", explica Fernández Liesa.
Hablar excesivamente, con una intensidad o tono superior al normal, especialmente si se hace con rapidez, forzar la vocalización, gritar, carraspear y toser en exceso o cantar con una técnica inadecuada provoca un funcionamiento perjudicial del aparato fonador. La situación empeora si en el entorno hay un excesivo ruido que obliga a subir la voz, un ambiente nocivo con polvo, humo de tabaco o gases nocivos. El consumo de tabaco y de alcohol deteriora también la mucosa vocal.
En los niños, la causa frecuente es una actitud de comunicación con los demás que abusa de los gritos y de hablar en voz alta. Tratan de imponerse a los demás subiendo el volumen de voz. Además, los niños no son conscientes de que su voz, afectada por el sobreesfuerzo vocal, suena diferente de la de los demás.
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
Tal y como asegura el vocal de la Sociedad Aragonesa de Otorrinolaringología, "en los últimos años ha habido un aumento muy importante de los recursos diagnósticos y terapéuticos en la patología de la voz. Se conoce mejor la anatomía de las cuerdas vocales y el funcionamiento de la vibración de las mismas. Los tratamientos, especialmente los quirúrgicos, se realizan de forma que respetan más el mecanismo de producción vocal, con lo que hay resultados mejores y menos complicaciones".
"Desde la perspectiva del diagnóstico", añade el doctor Fernández Liesa, "las posibilidades que ofrecen los actuales estroboscopios y equipos de análisis vocal son magníficas. El estroboscopio nos permite ver el movimiento de vibración de las cuerdas vocales a cámara lenta, y facilita además una mejor iluminación y la digitalización de la señal".
Por otro lado, la tecnología informática permite grabar y digitalizar la voz del paciente, medir con gran precisión las posibles irregularidades en la vibración de las cuerdas y cuantificar el grado de lesión de la voz. La fonocirugía, los microinstrumentos de gran precisión y el láser son algunos de los otros campos en los que se han producido importantes avances.
El experto recuerda que "cualquier persona con trastornos en la voz debe acudir al otorrinolaringólogo cuando la alteración se prolongue, por ejemplo, durante más de quince días a pesar del tratamiento o cuando se repita con frecuencia".
El tratamiento de los problemas de la voz se asienta sobre tres pilares fundamentales como son la medicación, la rehabilitación y la cirugía, y siempre se deben considerar las medidas preventivas. No obstante, el doctor Fernández destaca "la importancia que tiene el trabajar en equipos multidisciplinares, en los que el especialista coordina el tratamiento con foniatras, logopedas, profesores de canto, e incluso psicólogos y profesores". En muchas ocasiones basta con la rehabilitación para resolver una disfonía, corrigiendo los malos hábitos de emisión vocal mediante técnicas diversas --de relajación laríngea, de respiración, de proyección vocal-- como es el caso de los nódulos vocales de formación reciente.
EL CUIDADO DE LA VOZ EN NIÑOS
La Sociedad Española de Otorrinolaringología aconseja que los mayores no hablen fuerte o griten en presencia de los pequeños, porque estos tienden a imitarlos, y que respeten su turno de palabra cuando hablen con ellos, porque si no estos reaccionan gritando. Asimismo, la organización avisa que cuando un niño comienza a hablar alto puede estar manifestando un problema auditivo, y si tiene la voz ronca con frecuencia se debe tratar de modificar sus hábitos vocales.
También hay que evitar que el niño imite sonidos con emisiones guturales o roncas que puedan perjudicar la laringe y enseñarle a no gritar mientras hace ejercicio porque el riesgo de daño vocal es mayor, así como enseñarles a articular bien las palabras y a que no agoten el aire mientras hablan. Se aconseja también no fumar delante de los niños para no dañar su voz y darles abundantes líquidos a lo largo del día.