ZARAGOZA 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigadores de la Universidad de Zaragoza trabaja, en colaboración con el área de Terapia Celular de la Clínica Universitaria de Navarra, en la creación de un apósito de colágeno que permita prolongar la vida de las células madre en lesiones coronarias hasta que éstas se curen.
Según explicó el investigador Iñaki Ochoa en declaraciones a Europa Press, el infarto de miocardio es una de las principales causas de muerte entre hombres y mujeres en todo el mundo. Esta enfermedad está provocada por un riego sanguíneo insuficiente en las paredes del corazón, lo que provoca una falta de oxígeno y nutrientes en los cardiomiocitos haciendo que al final se mueran y se sustituyan por una cicatriz.
Este tejido fibrótico recién formado para sustituir a las células muertas, no es capaz de realizar el trabajo del corazón correctamente y provoca un fallo en su función conocido como insuficiencia cardíaca.
La ingeniería de tejidos y la medicina regenerativa constituyen una de las áreas de mayor crecimiento en el campo de la biología. Se basan en la aplicación de conceptos de ingeniería y de las ciencias biomédicas que hagan posible generar sustitutos biológicos de los órganos dañados para su reparación, sustitución o mejora de la función de un tejido.
Actualmente, varios grupos de investigación de todo el mundo han propuesto el uso de las células madre como terapia para reparar el tejido dañado. Los resultados obtenidos hasta el momento son prometedores pero presentan una gran limitación, la permanencia y supervivencia de las células madre en las proximidades de la zona isquémica.
Para tratar de solucionar este problema, investigadores del grupo GEMM de la Universidad de Zaragoza, liderados por el profesor Manuel Doblaré, y en colaboración con el área de Terapia Celular de la Clínica Universitaria de Navarra, tratan de desarrollar un apósito de colágeno que permita prolongar la supervivencia y permanencia de las células madre en las proximidades de la lesión.
La idea general del proyecto consiste en obtener células madre provenientes de la grasa del paciente y colocarlas en el laboratorio sobre membranas de colágeno provistas por la empresa Viscofan, para posteriormente implantárselas al paciente en la zona isquémica y prolongar lo suficiente la presencia de estas células como para que se regenere el tejido dañado.
En la fase actual del proyecto, se están evaluando en el laboratorio los tipos de membrana que mejores propiedades presenten desde el punto de vista mecánico y biológico como paso previo a los ensayos 'in vivo' en modelos animales.