Los antitranspirantes para evitar el sudor en las axilas sólo son eficaces si se aplican antes de dormir

Axila, torso, hombre
Foto: FLICKER/NICOGARAZZO1
Actualizado: martes, 16 junio 2015 12:02

MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Los antitranspirantes para evitar el sudor en las axilas sólo son eficaces si se aplican antes de dormir, según ha asegurado a Europa Press el profesor del Instituto Universitario Quirón de Xesus de Barcelona y miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), Agustín Aloma.

   Y es que, según ha explicado, es "muy difícil" que cuando se aplica durante el día el cloruro de aluminio hexahidratado --sustancia que actúa como antitranspirantes-- llegue a la glándula sudorípara y bloqueé la sudoración axilar. Un hecho que sí ocurre cuando se aplica justo antes de irse a dormir ya que actúa durante la noche.

   Por ello, el experto ha rechazado la aplicación de los desodorantes que aseguran ser antitranspirantes y ha recomendado usar estos sólo durante el día y para evitar el mal olor ocasionado por el sudor, concretamente, por la descomposición de las bacterias existentes en los pliegues del cuerpo.

   "El antitranspirante se tiene que utilizar por la noche, con la axila seca y pensando que uno se pone una cosa para no sudar al día siguiente. Y, por la mañana, aplicar los desodorantes como un cosmético para oler mejor y evitar la descomposición del sudor", ha apostillado el experto.

   Dicho esto, Aloma ha recordado que sudar es una manera de eliminar el calor del cuerpo dado que actúa como un sistema termorregulador del cuerpo. En este sentido, ha informado de que hay ocasiones en los que se puede sudar varios litros de agua al día, provocando un problema de deshidratación que requiere un consumo elevado de agua.

TRATAMIENTOS CONTRA LA SUDORACIÓN EXCESIVA

   Ahora bien, aunque todas las personas sudan, hay algunas que lo hacen en exceso, especialmente en las palmas de las manos, las plantas de los pies, axilas, cabeza y cara. Es lo que se conoce como hiperhidrosis focal.

   Para este tipo de pacientes, el experto ha recomendado la inyección de toxina butolínica que, a nivel axilar, ofrece unos "magníficos resultados" permitiendo que se estén entre ocho y diez meses sin sudar. Esta terapia se aplica también en las palmas de las manos aunque, según ha reconocido Alomar, el resultado es menos duradero, entre unos cuatro o cinco meses.

   Por otra parte, ha proseguido, los pacientes pueden también someterse a una simpactectomía transtorácica, realizada por cirujanos torácicos, que consiste en eliminar los ganglios encargados de estimular la sudoración de axilas y manos.

   No obstante, esta técnica presenta el inconveniente de que en el 25 por ciento o en el 50 por ciento de los casos aparece la hiperhidrosis compensatoria, es decir, que el paciente deja de sudar en manos y axilas pero aumenta la sudoración en otras localizaciones.

   En estas ocasiones, ha indicado Alomar, sería preciso inyectar toxina butolínica en aquellas zonas donde ha aparecido el sudor aunque, ha apostillado, hay veces en las que esta sudoración postoperatoria desaparece con el tiempo.

   "Se trata de un problema que preocupa mucho a los que lo sufren ya que les afecta en su vida diaria, tanto social como laboral. Afortunadamente ya contamos con estos tratamientos que, unidos a los antitranspirantes, están aportando muy buenos resultados", ha zanjado el dermatólogo.