JAÉN 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Salud y Bienestar Social, María Jesús Montero, ha defendido este jueves el modelo de sanidad público como único garante del acceso de la ciudadanía a los recursos en igualdad de condiciones, al tiempo que ha destacado su "eficacia y eficiencia" frente al "aparato de propaganda de las fuerzas conservadoras" que pretende destruirlo en beneficio de empresas del sector privado como, a su juicio, está ocurriendo en otras comunidades autónomas como Madrid, Valencia o Castilla la Mancha.
Durante la charla-coloquio Jaén-Debate que ha tenido lugar en la capital jiennense, a la que han asistido profesionales sanitarios, representantes de asociaciones ciudadanas y pacientes, entre otros, y que ha tenido como tema central 'La sanidad andaluza, un compromiso con lo público', ha subrayado que el Sistema Nacional de Salud ha permitido grandes resultados en esta materia y ha posibilitado un incremento espectacular en la esperanza de vida.
A su juicio, existen tres elementos esenciales en "la ola de propaganda conservadora" contra el sistema público de salud, que ha definido como "misiles para acabar con el Sistema Nacional de Salud", tal y como ha informado el Gobierno andaluz. "Se trata de mensajes interesados porque detrás hay un importante margen de negocio y, de mano de la crisis, se están produciendo importantes reformas de calado ideológico que pueden dar al traste con el sistema público", ha apuntado.
El primero de estos mensajes interesados, según Montero, es que el sistema público no es sostenible y está por encima de nuestras posibilidades, una idea que se traslada constantemente "como si fuera una suerte de lujo". Ante ello, ha abogado por "poner pie en pared", ya que plegarse ante estas afirmaciones falsas es algo que la sociedad no puede permitirse.
Ha recordado que el SNS en España es de los más baratos del conjunto de los sistemas más avanzados y ha retado a cualquier aseguradora privada a "que sea capaz de ofrecer el mismo servicio al mismo precio". En esta línea, ha asegurado que el sistema público "no es sólo sostenible, sino que es el único sostenible, aunque no lo será si cada vez se destina menos dinero a este sector".
En este sentido, la consejera se ha referido al sistema sanitario público como el que posibilita una relación más favorable en el cociente entre inversión y gasto por persona. Así, "en torno a 1.200 euros al año por habitante de media (a nivel nacional) permiten que los ciudadanos tengan acceso a los mejores medios y la mejor tecnología".
Otra de las "mentiras" que, según Montero, trasladan los que quieren destruir el modelo público de sanidad es que no funciona. Frente a ello, ha indicado que todos los estudios sobre coste sanitario ponen de manifiesto que los sistemas públicos son más baratos que los de provisión privada. Así lo indica la Propia Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial.
Los sistemas de provisión privada "no son mejores en empleo y dan peores resultados en salud", ha aseverado para poner como ejemplo a Holanda, donde después de la privatización emprendida hace años, actualmente es el país con mayor gasto, una situación que ha hecho extensiva también al sistema británico. La consejera ha subrayado, de este modo, que los sistemas del aseguramiento soportan mayor coste que los sistemas nacionales de salud.
INEFICIENCIA DEL COPAGO
El tercer "misil" contra el sistema público lanzado desde los sectores conservadores es que los ciudadanos utilizan de forma ineficiente los servicios públicos y que abusan de ellos, por lo que "hay que poner barreras en forma de copagos". Al respecto, ha defendido que "estas barreras sí hacen que el ciudadano se abstenga de ir al profesional a los primeros síntomas y sí lo haga cuando su patología ya está avanzada, con lo que la atención es mucho más cara". De este modo, ha explicado que al final, el coste global es mucho más caro e ineficiente con estos copagos.
En opinión de Montero, se trata introducir "la cultura del pago sanitario, que es la hija de ruta para las privatizaciones", por lo que, según ha advertido, "hay que estar muy alerta porque hay decisiones de difícil retorno y cuyas consecuencias no se pueden revertir". Por ello, ha apelado a la "contestación ciudadana necesaria" para evitar el desmantelamiento del sistema público de salud.
MODELO PARA LA EQUIDAD, CUESTIONADO
Además, la consejera ha hecho una reflexión sobre el Estado del Bienestar y sobre cómo este modelo que nació en Europa se está viendo ahora cuestionado en la actualidad fruto de la crisis. "Es el modelo de la clase trabajadora para lograr mayor equidad y cohesión social, estableciendo mecanismos de seguridad para que las personas llevaran su proyecto vital teniendo asegurados los servicios básicos", ha manifestado.
Para la titular de Salud, "atacar el Estado del Bienestar es atacar a la clase media y a un sistema de seguridad que se ha construido desde lo público y en el que el que más tiene, más paga, y el que menos tiene, menos paga, de manera que se produzca una redistribución de la riqueza que permita acceder a todos a la salud, independientemente de sus ingresos".
Junto a ello, ha considerado que, con motivo de la crisis, cuyo origen está en la economía especulativa, se están viendo sacudidos estos pilares del Estado del Bienestar, y se están generando dudas sobre su viabilidad. En este contexto ha apuntado que "muchos están empeñados en demostrar que el gasto público es el causante o es lo que ha agudizado las situaciones de crisis".