HUELVA 9 Ene. (EUROPA PRESS) - La familia de la niña de ocho años Ch.L.M. ha presentado una denuncia en el Juzgado de Instrucción número 2 de Huelva contra el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, al objeto de que se investigue una presunta negligencia en la muerte de la menor, que ingresó el pasado 24 de diciembre aquejada de una apendicitis y falleció tres días después a causa de una mortal infección. En declaraciones a Europa Press, la madre de la menor, Elena Masera, lamentó que, a pesar de que su hija "se quejaba de fuertes dolores en la tripa y tenía fiebres muy altas tras una operación de apendicitis que los médicos calificaron de normal, los facultativos no hicieron nada por determinar el origen de estos síntomas, que desembocaron en su muerte". Según relató, la niña ingresó en el Juan Ramón Jiménez el pasado 24 de diciembre aquejada de una apendicitis de la que fue intervenida ese mismo día, aunque al día siguiente "comenzó a tener vómitos y diarreas, mientras la fiebre con la que ingresó tampoco remitía". La madre de la menor fallecida comentó que, pese a su intranquilidad y de su llamada a los médicos, "éstos insistían en que se trataba de un cuadro médico normal de un postoperatorio, que se había visto agravado por una gastroenteritis, sin que le hicieran ningún tipo de pruebas, a pesar de que se pasaban a ver a la niña a la habitación". Esta situación se fue agravando, según continúa Masera, hasta el día 27 por la mañana, en que, "después de dos noches sin dormir por los fuertes dolores y a pesar de los calmantes que le habían puesto, la pequeña amaneció morada y muy débil, por lo que fue trasladada de urgencia a la UCI, donde murió horas más tardes sin que los médicos pudieran hacer nada por reanimarla de una parada cardíaca originada por la infección". La madre de la menor apuntó que los médicos le dijeron que la afección de la pequeña había derivado en una peritonitis que había infectado a la niña, de forma que "la inflamación que presentaba en la tripa se debía a la pus de la infección". En este sentido, Elena Masera justificó la denuncia presentada argumentando que "una simple radiografía para determinar el origen de la fiebre y las dolencias habría salvado la vida de mi hija" y añadió que, "si los médicos consideraron que esta reacción podría darse, no entiendo cómo no se controló el proceso de recuperación de mi hija, máxime cuando presentaba unos síntomas que se iban agravando y de los que tuvieron constancia en todo momento". PERITONITIS "RAPIDA" Fuentes hospitalarias consultados por Europa Press declinaron hacer declaraciones sobre el caso, puesto que se encuentra en los tribunales, si bien el director del Hospital Juan Ramón Jiménez, José Carlos Medina, manifestó al diario 'Huelva Información' que los datos que se tienen hasta el momento indican que la muerte se produjo por una peritonitis que evolucionó "de forma muy rápida". Según apuntó, desde el punto de vista técnico, la operación fue "correcta y bien resuelta", ni se habían soltado puntos de la sutura, ni había perforaciones ni el equipo había dejado nada al finalizar la operación y añadió que "la fatal evolución que ha tenido la pequeña tras ser operada de apendicitis ha sorprendido a todo el equipo" y, de hecho, se ha realizado una autopsia clínica porque "tenemos interés en conocer con exactitud qué ha pasado". Además, destacó que el hospital ha abierto un informe interno y ha desarrollado sesiones clínicas para analizar, en un proceso de autorrevisión, "qué se ha hecho y como se ha hecho y, técnicamente, las cosas se han hecho bien" y añadió que "en operaciones sencillas como es la de apendicitis existen, aunque a índices muy bajos, tasas de complicaciones y de mortalidad, al mismo nivel que en la totalidad de los hospitales del mundo occidental".
