MADRID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en funciones, Alfonso Alonso, ha pedido ser "absolutamente prudentes" y "no hablar con ligereza" sobre los supuestos retrasos en Galicia al administrar los nuevos medicamentos para la hepatitis C, por el que están investigados dos altos cargos del Servizo Galego de Saúde (Sergas).
"Hay que ser prudente, todo se mirará en los juzgados con el máximo rigor y las mayores garantías", ha defendido Alonso en la rueda de prensa posterior al Consejo Territorial de Servicios Sociales y del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia.
A pesar de que este retraso podría haber afectado a algunos pacientes que acabaron falleciendo sin recibir estos nuevos fármacos, el ministro en funciones ha recordado que hay que esperar al dictamen de los médicos y "no hablar en general y de manera ligera" ya que, en algunos casos, los pacientes con hepatitis C podían llevar infectados desde hace muchos años.
"Son personas que han sufrido un deterioro durante mucho tiempo, va a seguir muriendo gente que ha estado afectada por la hepatitis C, porque hay estadios de la enfermedad en los que, pese al tratamiento, estaban demasiado avanzados", según Alonso, reconociendo que los nuevos fármacos "han llegado tarde para algunas personas". "Ojalá hubieran salido antes", ha admitido.
No obstante, ha insistido en que España ha sido "pionera" a la hora de ofrecer estos fármacos y ha pedido seguir confiando en la "fortaleza" del sistema sanitario público y en los profesionales, que "hacen todo lo que está en su mano" por sus pacientes.
