SANTA CRUZ DE TENERIFE 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El aeropuerto de Tenerife Norte ha instalado cinco desfibriladores en el edificio terminal, una medida que, además de ampliar el alcance de los servicios sanitarios disponibles actualmente, supone una garantía de asistencia rápida y vital para cualquier pasajero, trabajador o usuario que pueda sufrir una parada cardiorrespiratoria.
Según ha informado Aena, las columnas de 'rescate cardíaco', en las que se encuentran los desfibriladores, están en zonas visibles y debidamente señalizadas: zona de facturación, zonas de llegadas y salidas, sala de recogida de equipajes y embarque de vuelos nacionales.
Los nuevos aparatos se suman a los dos que ya tenía el aeropuerto: uno situado en la ambulancia y otro disponible en el servicio de asistencia médica.
Estos equipos sanitarios permiten realizar maniobras de soporte vital básico, convirtiéndose en los primeros eslabones en la cadena de supervivencia hasta que lleguen los servicios médicos de urgencia. En un primer momento, cada aparato determina, mediante un electrocardiograma, la necesidad o no de aplicar una descarga, mientras guía al personal que lo usa indicándole los pasos a seguir.
De manera simultánea, el dispositivo activa automáticamente una señal de alarma al servicio médico del aeropuerto, que se desplazará al punto requerido para prestar asistencia en el menor tiempo posible.
La parada cardiorespiratoria fuera de un hospital es hoy la primera causa de muerte entre la población española, superando cuatro veces el número de víctimas en accidente de tráfico.
FORMACIÓN A EMPLEADOS
El tiempo de respuesta ante este tipo de incidencias resulta clave para la supervivencia del paciente. De hecho, el único tratamiento conocido para revertir la mayor parte de estas emergencias médicas es la aplicación de desfibriladores.
Por ello, el aeropuerto de Tenerife Norte ha hecho una inversión en la instalación y mantenimiento de estos cinco puntos de rescate cardiaco en la terminal, y en la formación de personas que desarrollan su labor en el recinto aeroportuario tinerfeño.
El uso de los nuevos dispositivos está autorizado al personal sanitario y a treinta empleados, a los que se ha formado para ello. Estos trabajadores, procedentes de varios departamentos, estarán capacitados para atender una emergencia en cualquier punto del terminal.