MADRID 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los expertos en dermatología del grupo de Psoriasis de la Academia Española de Dermatología y Venerología (AEDV) y la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) han lanzado la primera guía de manejo de la psoriasis en farmacia con el objetivo de dotar de información a los farmacéuticos para que ayuden, de esta forma, al paciente.
La guía, que cuenta con el apoyo de Laboratorios LEO Pharma, define por primera vez el papel que deben desempeñar los farmacéuticos en el abordaje de la psoriasis en colaboración con los dermatólogos especialistas en esta patología.
Este documento, que supone una vía de colaboración entre la AEDV y la SEFAC puede ir más allá de la psoriasis y ampliarse a otras patologías de la piel, analiza el diagnóstico de la enfermedad, el pronóstico, el manejo terapéutico con o sin prescripción médica y la atención farmacéutica así como, consejos para evitar la aparición de nuevas lesiones.
El presidente de la SEFAC, Jesús Gómez ha explicado que el trabajo "debe ser integral y multiciplinar. Si no vamos todos alineados en una enfermedad crónica, es muy difícil lograr un cuidado adecuado y una adherencia al tratamiento".
Sobre el papel que desempeña el farmacéutico, Gómez ha afirmado que "la guía define en qué casos debe concienciar a la gente para que vaya al dermatólogo si es necesario ya que existe un alto porcentaje de pacientes que se automedica en exceso, que no es lo mismo que el autocuidado responsable".
Tras un diagnóstico médico, el farmacéutico tiene que ayudar al afectado a seguir el tratamiento y transmitirle consejos de salud para contar con una buena higiene, una buena hidratación y emoliencia, además de detectar picos y hacer un seguimiento farmacoterapéutico personalizado, siempre alienado con la decisión médica, ha continuado el responsable.
CONTINUIDAD DEL TRATAMIENTO
Uno de los grandes retos del farmacéutico es que el paciente siga el tratamiento ya que "cuando estás bien no te acuerdas, te liberas y bajas la guardia, por eso es importante estar al lado del paciente y que éste sepa que tiene en quien confiar o a quien consultar".
Por su parte, el dermatólogo y coautor del documento, Gregorio Carretero, ha recalcado que la falta de adherencia al tratamiento es el enemigo número uno por lo que es importante definir una buena relación entre médico y paciente para que sea de confianza entre ambas partes, para que se sienta en buenas manos y sea capaz de plantearle al dermatólogo sus dudas y cuestiones.
Según Carretero el papel que debe desempeñar el dermatólogo es el de comprender la complejidad de la enfermedad y el de disponer de una gran sensibilidad para manejar al paciente en su totalidad.