MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Aprender una tarea compleja, como por ejemplo el malabarismo que supone procesos visuales y del movimiento, da lugar a cambios en la materia blanca conectiva del cerebro, según un estudio del Centro de Imágenes de Resonancia Magnética Funcional de Oxford en Reino Unido que se publica en la revista 'Nature Neuroscience'.
La materia gris del cerebro en su mayor parte está formada por los cuerpos celulares de las neuronas, mientras que la materia blanca la constituyen las proyecciones que envían estos cuerpos celulares que conectan las neuronas entre sí. Aunque investigaciones previas han informado sobre cambios en la materia gris del cerebro de personas que aprenden a realizar malabares, el estudio actual es el primero en demostrar cambios comparables en las conexiones de materia blanca.
Para probar la idea de que la práctica de una nueva habilidad pueden en realidad producir cambios en la materia blanca, los científicos escanearon a un grupo de individuos antes y después de seis semanas de entrenamiento en malabares. Descubrieron cambios en el lóbulo parietal del cerebro, una región vinculada ya con las funciones visuales y del movimiento.
Además, los autores descubrieron cambios en la materia gris asociados al entrenamiento malabar que también estaban localizados en el mismo área que los cambios en la materia blanca. Según señalan los autores, esto sugiere que el entrenamiento influyó la estructura tanto de los cuerpos celulares de las neuronas como de sus proyecciones.
Estos dos tipos de cambios siguieron siendo visibles cuando los sujetos fueron escaneados de nuevo cuatro semanas después de la última vez que habían practicado malabarismo, lo que muestra que los cambios son bastante duraderos.
Sin embargo, los científicos no descubrieron correlación entre la magnitud de los cambios en la materia gris y blanca, lo que condujo al equipo a proponer que estos podrían ser dos procesos relativamente independientes.