MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los adultos de mayor edad que gastan más energía a lo largo de las actividades diarias, incluyendo aquellas que no suponen realizar ejercicio, tienen una tasa de mortalidad hasta un 69 por ciento menor que los adultos menos activos, según un estudio del Instituto Nacional de Envejecimiento en Bethesda (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Journal of the American Medical Association' (JAMA).
En su estudio los científicos querían determinar la asociación entre el gasto de energía de las actividades diarias con la mortalidad de todo tipo en un grupo de 302 adultos de entre 70 y 82 años que se encontraban en buena salud física y social.
Los investigadores midieron el gasto de energía durante dos semanas utilizando una técnica que incluía la determinación de la tasa a la que ciertos isótopos de hidrógeno y oxígeno se eliminan del organismo como dióxido carbónico, junto con la tasa metabólica. Los participantes fueron seguidos durante una media de seis años entre 1998 y 2006.
Descubrieron que los niveles más altos de gasto de energía y actividad física se asociaron con un menor riesgo de mortalidad. En comparación con la tercera parte de los individuos con el gasto de energía más bajo, aquellos con el gasto más elevado tenían un 69 por ciento menos de riesgo de mortalidad.
Según los autores, los resultados del estudio muestran que cualquier gasto de energía en los mayores ayuda a disminuir los riesgos de mortalidad y señalan que cualquier aumento en el mantenimiento de su actividad energética mejoraría la salud de estas personas.