MADRID 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha explicado que la nueva Ley del Aborto que, según ha precisado estará lista para antes de finales de este año, permitirá interrumpir el embarazo ante una situación de conflicto entre los derechos de la madre y del concebido, siempre que el legislador resuelva el conflicto en favor de la madre, pero nunca antes.
"¿Que pasó con la ley que suprime resolver el conflicto durante un número determinado de tiempo porque dice que aunque exista ese conflicto en las primeras semanas no hay protección ninguna para el concebido y a partir de una semana sí? Es también dudoso y el Constitucional dijo que eso no valía. ¿Eso significa que no habrá posibilidad de interrupción del embarazo? Cuando haya conflicto habrá que resolver ese conflicto. Lo que no podemos decir, porque iríamos en contra del TC, es que durante un determinado tiempo se desproteja al concebido", ha precisado.
En este sentido, ha explicado que el tema del aborto es un tema "muy delicado, muy sensible" y se ha remitido a la sentencia de 1985 del TC en la que, según ha recordado, se establece que "desde que se produce la concepción hay un derecho a la vida que no es un derecho absoluto y la mujer, cuando se producen situaciones de conflicto sobre su vida, su salud, su salud psíquica, tiene derechos que tampoco son valores absolutos". El legislador, según ha remarcado, es quien tiene que resolver esos conflictos.
Preguntado por si la nueva ley aumentará el número de viajes de mujeres para abortar en el extranjero, Gallardón ha subrayado que eso "lo dirán los mismos que dicen que se endurece el Código Penal para aumentar la población penitenciaria".
En cualquier caso, ha apuntado que es un asunto que "divide" a la sociedad española y ha señalado que el PSOE cambió la legislación "para distraer la atención de los problemas económicos que entonces nacían". Ante esta situación, Gallardón ha asegurado que pretende volver al consenso que nace de la sentencia del TC de 1985.