MADRID 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
La responsable legal del Departamento de Negligencias de reclamador.es, Esperanza Palacio, ha asegurado que un paciente podría reclamar una indemnización al servicio de salud de la comunidad autónoma por los daños derivados del retraso en la realización de la prueba, consulta con el especialista u operación.
Uno de los principales problemas a los que se enfrenta la sanidad pública en España son sus largas listas de espera, tanto para intervenciones quirúrgicas como para pruebas diagnósticas o consultas de especialistas. Traumatología, Oftalmología y Cirugía General son, por este orden las especialidades con más pacientes en lista de espera para operarse hasta el primer semestre de 2019.
La competencia de sanidad está derivada a las comunidades autónomas, donde se fija en sus diferentes normativas los plazos máximos de espera para los pacientes. Así, por ejemplo, pese a que en Andalucía el plazo es de 180 días, en muchas ocasiones este plazo se supera, llegando incluso a duplicarse y existir listas de espera que llegan a un año.
Hasta un año se establece el plazo máximo en Cataluña para procesos quirúrgicos programados de prioridad baja o 90 días para pruebas diagnósticas y consultas de especialistas de prioridad ordinaria. Además, recientemente se han fijado los plazos máximos de listas de espera en Asturias, alcanzando un máximo de 60 días para mamografías, resonancias, TACs y colonoscopias, y 180 días en casos de cirugías cardíacas, ginecológicas, implantes de prótesis, o cataratas.
"Existe el Real Decreto 1039/2011 por el que se establecen una serie de criterios básicos para determinar los plazos máximos de las listas de espera. No obstante, son casi 600.000 personas las que se encuentran actualmente a la espera de una intervención quirúrgica", ha dicho la experta.
Ahora bien, apostilla, para que un paciente sea indemnizado, hay que demostrar que esas nuevas dolencias o secuelas son derivadas del retraso de ese procedimiento médico y que, de haberlo realizado con anterioridad, se podrían haber evitado o reducido.
Otra opción que tienen los pacientes, ante la angustia provocada por el excesivo retraso de las listas de espera, es acudir a la sanidad privada y solicitar, posteriormente, el reintegro de los gastos en los que haya incurrido por los perjuicios padecidos como consecuencia del funcionamiento deficiente de la Administración Sanitaria.
"Como en otras reclamaciones por negligencia médica se trata de determinar el nexo causal, es decir, la relación causa (retraso en la lista de espera) y efecto (secuelas u otras enfermedades derivadas) para que la reclamación de indemnización de los daños derivados del retraso en la lista de espera sea viable. Aquí es fundamental, al igual que en otras situaciones indemnizables por mala praxis, el perito médico, quien, con el historial clínico y el análisis del resto de documentación, determina que el retraso en realizar una prueba o una intervención quirúrgica es el desencadenante de una lesión o agravamiento de una enfermedad", ha zanjado la abogada.