MADRID, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El 90 por ciento de los casos de melanoma están asociados a la exposición a los rayos ultravioleta. Por ello, los expertos recomiendan estar alerta ante "las señales de peligro en la piel tras el verano y visitar al dermatólogo".
Además, los especialistas lamentan que los ciudadanos tomen el sol sin protección, ya que "puede convertir en un serio problema para la piel y para la salud, y provocar manchas". En concreto, afirman que se produce "una gran variación en la forma de los lunares, sequedad y eritema".
Para facilitar la prevención y el tratamiento precoz de estas complicaciones, los expertos de la Clínica Martín Anaya señalan como uno de los signos de alerta el hecho de que un lunar tenga partes diferentes las unas de las otras. Sin embargo, esta no es la única advertencia.
Así, señalan que "hay que estar atentos a los bordes irregulares, borrosos o dentados; a los colores rojizos, blanquecinos y azulados sobre lesiones de color negro; y a los lunares que midan más de seis milímetros o que aumenten de tamaño".
Por otra parte, los especialistas significan que las manchas tienen su origen "en los melanoncitos, las células encargadas de generar la melanina, que a su vez es que da un tono uniforme y bronceado a la piel". De esta manera, éstas se producen si estas células sufren alteraciones "por edad, cansancio, malos hábitos, o genética", observan.
Para tratarlos existen dos tipos de terapias: el 'peeling' despigmentante y el tratamiento mediante luz pulsada. "Prometen resultados excepcionales en tiempo casi récord", concluyen desde la Clínica Martín Anaya.