MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Medicina General (SEMG) aseguró que el 80 por ciento de los medicamentos que hay en los botiquines de los hogares españoles son antibióticos acumulados de anteriores prescripciones médicas, y que "suponen un riesgo", ya que después se utilizan para automedicarse. No obstante, señaló que sólo el 47 por ciento de los pacientes a los se receta este tipo de fármacos cumple el tratamiento hasta el final.
Durante el XII Congreso Nacional y VII Internacional de la Medicina General Española, que se celebra en Valencia hasta el 17 de junio, el doctor Carlos López Madroñero, miembro del grupo de trabajo de Patología Infecciosa y Antimicrobianos de la SEMG, recordó que incumplir el tratamiento provoca "el desarrollo de resistencias bacterianas y la alteración del ecosistema".
En este sentido, los médicos generales reunidos en Valencia hicieron un llamamiento a la ciudadanía "para que respete escrupulosamente las indicaciones de su médico y cumpla la terapia prescrita con antibióticos (y cualquier otro tipo de fármacos) hasta el final".
Asimismo, defendieron que estos medicamentos "no deberían venderse sin receta médica", ya que la Ley lo prohíbe terminantemente y creen conveniente establecer un consenso sobre política antibiótica a nivel de la UE", así como regular su uso en veterinaria, "porque de nada sirve controlar el uso de antibióticos en humanos si luego se utilizan indiscriminadamente en animales", según López Madroñero.
No obstante, este experto reconoció que parte de la responsabilidad del fracaso terapéutico con antibióticos recae sobre el facultativo, ya que "en el 40% de las infecciones víricas, se prescribe tratamiento con antimicrobianos", aunque culpó de esta situación a "la masificación y al poco tiempo del que disponen los médicos para atender a los pacientes, realizar un diagnóstico y prescribir un tratamiento".