El Colegio de Farmacéuticos prepara un prototipo de cruz específico para la ciudad
BARCELONA, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
El 60% de las farmacias de Barcelona deberán reducir el tamaño y eliminar el parpadeo de sus cruces rojas, situadas en la fachada del establecimiento, según datos facilitados a Europa Press por el Colegio de Farmacéuticos de la provincia.
El Ayuntamiento de Barcelona, a través del Instituto Municipal de Paisaje Urbano, el Colegio de Farmacéuticos y la Asociación de Farmacias de Barcelona firmaron el pasado junio un convenio para regular los carteles en forma de cruz de estos establecimientos.
Un total de 600 de las 1.024 farmacias que hay en la capital catalana se han adherido a este convenio, que es "voluntario", explicó a Europa Press la vocal de la junta directiva del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, Teresa Bassons.
Según Bassons, el resto de farmacias no se han sumado al acuerdo porque ya cumplen con la ordenanza municipal, que desde 1999, que regula el tamaño, las características y las condiciones que deben cumplir los letreros comerciales.
Las farmacias, junto con los aparcamientos, los cajeros automáticos y los hoteles son uno de los cuatro establecimientos que tienen permiso para utilizar letreros bandera, es decir que sobresalgan de forma perpendicular a la fachada.
Sin embargo, en los últimos años se han disparado las cruces de farmacia que incumplen la normativa municipal, y de hecho, a lo largo de 2005, los distritos ya empezaron a abrir expedientes sancionadores a algunos establecimientos, debido a las quejas vecinales, que protestaban por la intensidad lumínica de algunas cruces.
PORTABELLA, SATISFECHO.
El presidente del Instituto Municipal de Paisaje Urbano, Jordi Portabella, se mostró muy satisfecho con la respuesta de los farmacéuticos ante la regulación, que establece que las cruces no podrán superar los 70 por 70 centímetros, que se deberá eliminar el parpadeo y reducir la intensidad lumínica.
Inicialmente, el acuerdo establecía distintas fases para que los farmacéuticos se adaptaran a la normativa, pero ellos mismos han pedido "hacerlo todo de golpe", señaló Portabella, por lo que para algunos cambios, como eliminar el parpadeo, se ampliará el plazo para antes del verano.
El Ayuntamiento de Barcelona continúa manteniendo el 31 de marzo de 2008 como plazo máximo para que las cruces luminosas se adapten a la normativa y se ha comprometido que los establecimientos que se apunten al convenio no serán sancionados durante los meses que tienen para adaptarse a la regulación.
En declaraciones a Europa Press, Portabella valoró "muy positivamente" que se haya logrado firmar este acuerdo, así como la "voluntad de consenso" del sector farmacéutico.
Ahora, el Instituto de Paisaje Urbano está estudiando la "situación y casuística" de cada farmacia y elaborando una ficha personal sobre los cambios que deberán realizarse en cada establecimiento, apuntó.
Pese a que el Colegio de Farmacéuticos no ve con malos ojos la necesidad de que los farmacéuticos se adapten a la normativa, Bassons constató que se trata de un sector "muy visible" y lamentó que el plazo para adaptarse a la regulación sea "corto".
También destacó la "alta" inversión económica que deben afrontar los farmacéuticos. Según Bassons, poner una nueva cruz identificativa y realizar estos cambios puede suponer para el dueño una inversión "de entre 3.000 y 6.000 euros".
El Instituto de Paisaje Urbano financiará el 25% del coste de las obras, algo que ya se había reclamado desde el Colegio de Farmacéuticos.
NUEVO PROTOTIPO DE CRUZ LUMINOSA.
Para ayudar a los farmacéuticos a que el coste de una nueva cruz luminosa no sea tan alta, el Colegio de Farmacéuticos ha encargado un prototipo de letrero, especialmente diseñado para las farmacias de Barcelona, aunque "no será obligatoria", según Bassons.
La intención de este colegio profesional es que la nueva cruz "responda a una imagen corporativa" y que los farmacéuticos "se puedan ver beneficiados económicamente, ya que la adquisición de este letrero se haría a través de un sistema de concurso", apuntó.