IBIZA 20 May. (EUROPA PRESS) -
Entre el 1 y el 5 por ciento de la población toma el llamado Sintrom, un medicamento que combate la creación de trombos o coágulos en la sangre y, por tanto, los infartos, y que en Eivissa y Formentera necesitan cerca de 3.000 personas que son atendidas en la actualidad tanto en el Hopital de Can Misses como en los Centros de Salud de Sant Antoni, Santa Eulalia y Es Viver.
Según la jefe del servicio de Hematología del Hospital de Can Misses, Maria Udina, ésta es una medicación revolucionaria por sus matices preventivos. Tras ser descubierta a finales de la década de los '60, cuando empezó a dosificarse a los pacientes que llevaban válvulas cardíacas.
Fue en los '90 cuando se amplió su utilización en casos de enfermedades que tenían una base trombótica. Entonces fue cuando tomó el cariz preventivo de este tipo de eventos antes de que ocurran, "como por ejemplo las personas que tienen arítmias cardíacas, una enfermedad muy prevalente en personas mayores de 60 años", apuntó Udina en declaraciones a Europa Press.
"De esta forma se han evitado muchas muertes, se han evitado ingresos hospitalarios, el sufrimiento de pacientes y de sus familias, y es por ello que esta es una medicación muy importante en la actualidad para prevenir episodios de esta enfermedad", arguyó la jefe del servicio de Hematología.
La doctora remarcó la importancia del control firme sobre este tratamiento anticoagulante una vez al mes, porque es una medicación que también tiene unos riesgos para el paciente. "El más importante es la hemorragia, que puede comprometer la vida del paciente, y es por ello que es una medicación que necesita un estrecho control analítico por parte de los hematólogos", recordó Udina.
De este modo, los pacientes que toman esta medicación acuden una vez al mes a hacerse estos controles en el Hospital de Can Misses o a diversos Centros de Salud.
La jefe del servicio de Hematología señaló que desde 2002 se inició la descentralización sobretodo en la fase de la punción del paciente en el dedo, que puede hacerse en la actualidad en los Centros de Salud de Sant Antoni, Santa Eulalia, Es Viver y Can Misses, "y de aquí a un tiempo, también se llegará a hacer en las unidades básicas".
De este modo, acercan la asistencia al paciente que no debe ir obligatoriamente al Hospital, "un hecho que se mejora gracias a la red informatica con la que está conectada toda el Area de Salud de Eivissa y Formetnera", detalló Udina.
Desde el Hospital ven el resultado de las analíticas de los Centros Salud, y los hematólogos dosifican y envían la pauta por la red a los diferentes centros, "y así la calidad no baja porque somos los especialistas quienes seguimos marcando las dosis".
De igual manera se lleva a cabo en Formentera, que desde 2000 se inició el contacto por videoconferencia y, posteriormente, con la instalación de la red informática, se aplicó el mismo sistema que en la isla de Eivissa.
CALIDAD DE VIDA.
Para todos aquellos pitiusos que toman Sintrom, Udina lanzó varios consejos para mejorar su calidad de vida. "Es importantísimo seguir el control estrictamente, y no tomar nunca ninguna pastilla extra, porque podría conllevar un riesgo para su vida", inicióla hematóloga, quien reiteró que si algun paciente olvida su medicación, no repita la dosis.
Asimismo, los ciudadanos que tomen Sintrom deben tener en cuenta los otros medicamentos que se toman, "porque hay algunos que interfieren en la misma, como algunos calmantes o antiinflamatorios".
Por último, "que coman de todo, variado, sin excederse en nada, y si los especialistas percibimos que necesitan más un alimento que otro se lo ajustaremos con las pautas mensuales".
Con los años la jefe del servicio de Hematología aseguró que se afinará mucho más en los diagnósticos con todos los estudios de biología molecular y se podrá saber quien tiene una tendencia a padecer un infarto.
"De momento, las situaciones en las que la medicación anticoagulante está indicada están muy bien definidas y de ahí no nos podemos pasar, porque recordemos que este no es un medicamento exento de riesgos, que debe recetarse cuando hay una base científica, y solo hay que tomarlo cuando hay un factor que predispone a la trombosis", concluyó Udina a Europa Press.