Entre un 30% y un 60% de las personas que sufren epilepsia "logran curarse", según un médico del Hospital Casa de Salud

Actualizado: sábado, 21 enero 2006 15:27

VALENCIA 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

Unos 400.000 españoles tienen epilepsia y cada año aparecen 20.000 nuevos pacientes, según afirmó un especialista del Hospital Casa de Salud, quien aseguró que entre un 30 por ciento y un 60 por ciento de las personas que sufren epilepsia "logran curarse", informaron fuentes de este centro hospitalario..

Uno de los neurocirujanos del Hospital Casa de Salud, Guillermo Cruz Campos, explicó que este porcentaje de curación se debe a que si la epilepsia surge en la infancia "en muchas ocasiones, con el cambio hormonal, por ejemplo, puede llegar a desaparecer".

Así, el especialista del Hospital Casa de Salud, que publicó recientemente el libro 'Epilepsia y discapacidad', indicó que la epilepsia "puede afectar a cualquier persona y a cualquier edad" y subrayó que "hay dos picos de mayor incidencia, el primero, por problemas durante el parto, y el segundo, en las personas mayores de 65 años, fundamentalmente, por los cuadros vasculares que presentan".

Asimismo, indicó que existen dos tipos de epilepsia, "la idiopática, es decir, la que se hereda y que se da, mayoritariamente, en la gente joven y, por otro lado, la sintomática, que es la que aparece a raíz de algún síntoma secundario a través, por ejemplo, de un traumatismo o infarto cerebral".

En este sentido, el doctor Cruz Campos señaló que "la prevención es bastante complicada, salvo en algunos casos hereditarios en los que los afectados tienen unos cuadros muy definidos desde el punto de vista genético", puntualizó.

El doctor Cruz Campos explicó que la epilepsia en una niña "puede acarrearle problemas de orden cognitivo en relación", dijo, "a sus funciones intelectuales, ya que sufriría trastornos en la tensión y alteraciones en el aprendizaje, además de otros problemas en su ámbito social".

Por su parte, indicó que las principales consecuencias de la epilepsia en mujeres son "las alteraciones de orden estético debido a la medicación, ya que les puede aparecer vello en la cara o más cantidad en el resto del cuerpo, alteraciones hormonales, alteraciones en la propia maternidad, ya que cuando tienen un hijo no descansan bien por las noches y esto les repercute en su salud, o, por ejemplo, discapacidad para la maternidad también, es decir, que el bebé tenga algún tipo de alteración".

Asimismo, el doctor Cruz Campos indicó que en mujeres mayores de 65 años, la epilepsia les puede acarrear, según ejemplificó, "alteraciones en el metabolismo, lo que les podría provocar un riesgo de fractura mucho mayor que a cualquier otra persona".

El especialista del Hospital Casa de Salud explicó que en general, tanto para hombres como para mujeres, "existen unas consecuencias debido a las manifestaciones de esta enfermedad como, por ejemplo, las limitaciones en empleos de licencias para aviación, los problemas para desarrollar una actividad náutica como el buceo, o las limitaciones para llevar a cabo una vida militar en condiciones".

Por otra parte, el neurólogo del Hospital Casa de Salud señaló que en los últimos diez años han aparecido diez antiepilépticos nuevos que, dijo, "reducen notablemente los efectos colaterales que provocaban los que ya existían, pero que no resuelven el problema totalmente".

Así, el doctor Cruz Campos indicó que "en ocasiones, se recurre a la cirugía para tratar a las personas que padecen epilepsia" aunque, puntualizó, "recurrir a esta técnica dependerá de si hay alguna lesión en el cerebro del paciente".

Al respecto, el especialista señaló que "hay un nuevo neuro-estimulador para el tratamiento de la epilepsia que no requiere intervención en el cerebro, sino en el cuello del paciente, y permite controlar las crisis del enfermo y reducir la medicación".

En este sentido, el doctor Cruz Campos explicó que este aparato, que requiere "de una operación simple", no se puede poner en todos los casos como, por ejemplo, "en enfermos que padezcan asma o arritmias", concluyó.