La "volatilidad económica" y los "riesgos de recesión" aumentan la vulnerabilidad al virus y las infecciones
MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El 25 por ciento de los diagnósticos de VIH en Europa se asocia con el consumo de drogas, con proporciones mucho más altas en el este (33%) que en el oeste (5%) y la zona central (7%), según destaca el informe 'VIH en la Región de Europa: la vulnerabilidad y respuesta', realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Banco Mundial y el Instituto de Higiene y Medicina Tropical de Londres (LSHTM, por sus siglas en ingles).
El dato positivo es que menos del 1 por ciento de las infecciones se producen entre profesionales del sexo que no se inyectan drogas, aunque este dato llega al 10 por ciento entre lo que sí lo hacen, así como entre los trabajadores masculinos del sexo y los transexuales; en cuanto a las infecciones por relaciones sexuales entre varones, estas representan el 10 por ciento de todos los diagnósticos de VIH en Europa, con tasas más altas reportadas en Europa Occidental (36%), seguido de Europa central (22%) y Europa del Este (0,5%).
El análisis pone de relieve el papel fundamental de los factores ambientales -- sociales y estructurales -- en el desarrollo de la epidemia del VIH y las respuestas de prevención del VIH, siendo "la exclusión social el motor principal de las epidemias de VIH en Europa", según el director del programa de VIH/sida, enfermedades de transmisión sexual y la hepatitis viral de la OMS para Europa, Martin Donoghoe.
Los factores sociales y estructurales, como la pobreza, la marginación y el estigma, y no sólo los comportamientos individuales, están dando forma a la epidemia de VIH en Europa. Asimismo, alertan, "la volatilidad económica y los riesgos de recesión aumentan la vulnerabilidad al VIH y las infecciones".
"Es un círculo vicioso: la marginación social aumenta el riesgo de ser infectado por el VIH y el VIH agrava la marginación social, añadiendo otra capa al estigma", ha explicado Donoghoe, quien cree que el programa nuevo marco de política regional, Salud 2020, para Europa "apoyará el fortalecimiento de los sistemas de salud para el acceso universal a la salud, incluso para los ciudadanos más marginados".
El informe muestra que la prevención del VIH requiere un cambio social y ambiental y, por lo tanto, pide que los responsables políticos y los ejecutores de programas del VIH orienten sus políticas y programas para maximizar su impacto en la salud y la respuestas al VIH en Europa, y obtener un mayor rendimiento de las inversiones relacionadas con el VIH.
"El aumento de VIH en los países del sur de Europa más afectados por la recesión subraya las profundas interacciones recíprocas entre la pobreza, la exclusión y la enfermedad", ha advertido el director del Programa Mundial contra el VIH/Sida del Banco Mundial, David Wilson.
Para las organizaciones que han realizado el estudio el número de afectados es "desproporcionado", y destaca que en 2011 se notificaron 1,5 nuevas infecciones de VIH y el grupo señalado (drogas inyectables, los trabajadores sexuales y hombres que tienen sexo con hombres) representan alrededor del 50 por ciento de los diagnósticos totales.
TAMBIÉN AFECTA A ASIA CENTRAL.
Este nuevo informe, también muestra que ser marginado también impulsa la epidemia en Asia central. "El VIH entre los consumidores de drogas en las comunidades pobres y marginadas en Europa oriental y Asia central subrayan la importancia y relevancia global de adoptar las metas recientemente marcadas por el Banco Mundial para acabar con la pobreza extrema y promover la prosperidad común", ha explicado Wilson.
El Grupo del Banco Mundial, la OMS y el LSHTM analizarán el estudio este viernes para tratar de poner en marcha nuevas recomendaciones. El evento, que se va a desarrollar en Londres, incluye un debate entre los expertos de alto nivel y responsables de las políticas sobre el mantenimiento del impulso para prevenir el VIH.
"Ahora es un momento importante para Europa. El impulso de la prevención del VIH se debe mantener este clima de incertidumbre económica y la financiación", ha afirmado el profesor Peter Piot, director de la LSHTM, para quien este estudio "muestra cómo las instituciones pueden trabajar juntos".