Cannabis
WIKIMEDIA COMMONS
Publicado: jueves, 18 enero 2018 17:51

MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

Investigadores del Instituto Nacional sobre el Abuso del Alcohol de Bethesda en Maryland (Estados Unidos) han descubierto que el consumo abusivo del cannabis puede alterar la actividad de las regiones cerebrales que están vinculadas a emociones negativas.

En su trabajo, publicado en la revista 'Biological Psychiatry: Cognitive Neuroscience and Neuroimaging', vieron que los jóvenes con dependencia a esta sustancia tienen alterada su función cerebral vinculada a determinados trastornos emocionales o un mayor riesgo de psicosis. Y estas alteraciones podían ser más pronunciadas en aquellas personas que comenzaron a consumir cannabis a edades más tempranas.

Además, los hallazgos revelan posibles efectos negativos a largo plazo de este abuso del cannabis en la función y el comportamiento del cerebro, que siguen siendo en gran medida desconocidos a pesar de su elevado consumo y de la corriente cada vez mayor que aboga por legalización.

En el trabajo evaluaron los datos de la actividad cerebral en reposo de 441 adultos jóvenes, y los compararon con los de un pequeño grupo de 30 personas que abusaban del cannabis, que presentaron una conectividad extrañamente alta en regiones cerebrales importantes para el procesamiento de la recompensa y la formación de hábitos. Unas regiones que también se han vinculado a la aparición de psicosis en trabajos previos.

"Estos datos de las imágenes cerebrales proporcionan un vínculo entre los cambios en los sistemas cerebrales implicados en la recompensa y la psicopatología y el abuso crónico de cannabis, sugiriendo un mecanismo por el que el uso intensivo de este popular medicamento puede llevar a la depresión y otras formas más graves de enfermedad mental", ha explicado Cameron Carter, editora de la revista que publica el trabajo.

Además, las alteraciones cerebrales también se asociaron con sentimientos intensos de emociones negativas, especialmente la alienación, donde uno siente hostilidad o rechazo de los demás. El vínculo apunta a un posible mecanismo biológico de por qué los sentimientos de alienación a menudo se incrementan profundamente en las personas con dependencia del cannabis.

"Curiosamente, la hiperconectividad fue más fuerte en las personas que comenzaron a usar cannabis en la adolescencia temprana", ha apuntado Peter Manza, uno de los autores, lo que se alinea con los informes de un mayor riesgo de problemas psiquiátricos cuando el consumo de cannabis comienza a edades más jóvenes.

Según este experto, la medición de la actividad cerebral en reposo es un procedimiento relativamente fácil y no invasivo, por lo que el enfoque podría ser una medida útil para rastrear el desarrollo de síntomas psiquiátricos vinculados al consumo de cannabis.