Tres investigaciones coinciden en que es posible detectar el riesgo de ovarios poliquísticos incluso antes de nacer

Ovarios poliquísticos
CLÍNICA MARGEN - Archivo
Publicado: lunes, 21 mayo 2018 14:34

MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -

Tres trabajos de tres grupos de investigación independientes han coincidido en que se podría detectar el riesgo de síndrome de ovarios poliquísticos (SOP) en las niñas de edades prepubertales, e incluso antes de su nacimiento, creando así posibilidades de prevención del desarrollo de la patología completa después de la pubertad.

El SOP es la principal causa de infertilidad en mujeres jóvenes y, en sus formas avanzadas, afecta seriamente a su salud, más allá de sus efectos sobre la fertilidad. Su origen puede estar en una coordinación defectuosa de reacciones hormonales que afecta diferentes funciones del organismo.

Según los resultados de estas tres investigaciones, la causa inicial del problema es la función de un cierto tipo de células de la glándula pituitaria (o hipófisis), mientras que las anomalías que afectan otros sistemas, endócrinos y no endócrinos, parecen ser efectos secundarios. Considerando como cierto este origen, los investigadores han llegado a la conclusión de que se podría detectar el riesgo de SOP en las niñas de edades prepubertales.

Los tres trabajos concluyen que el origen del síndrome de ovarios poliquísticos (SOP) viene de un mal funcionamiento de un determinado tipo de receptores, localizados en la hipófisis, una glándula endocrina localizada en la base del cerebro.

Para el equipo de investigadores de la Universidad de Granada y la Clínica MARGen de esta ciudad, liderado por el doctor Jan Tesarik, la causa primaria del SOP es una respuesta defectuosa de los receptores específicos de la hipófisis a la acción de la hormona llamada hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH) que proviene del hipotálamo, la parte de cerebro adyacente a la hipófisis. Esta anomalía podría ser de origen genético, si bien desde este grupo de investigadores no descartan otras causas.

Este origen genético también ha centrado el trabajo de un equipo de investigadores franceses e israelíes que estudia un caso familiar de SOP asociado con una mutación del receptor para GnRH en la hipófisis. Sin embargo, otro trabajo publicado recientemente por un equipo de científicos del Instituto Nacional Francés de Investigación en Salud y Medicina sugiere que la disfunción del receptor para GnRH puede ser causada por factores externos durante el desarrollo uterino del feto femenino, en concreto por la concentración de la Hormona Antimulleriana (AMH) en la sangre de la madre.

"Las concentraciones de AMH suelen bajar durante el embarazo, pero no siempre es así en las madres con SOP", ha señalado el doctor Tesarik, puntualizando que, sin embargo, "no todas las hijas nacidas de madres con SOP desarrollan el mismo síndrome después de la pubertad". "Sí es posible que una predisposición genética (mutación del receptor para GnRH) potencie el efecto de las concentraciones suprafisiológicas de AMH durante el embarazo", ha añadido.

Los investigadores franceses han provocado, en un modelo animal (ratón), el desarrollo del SOP inyectando concentraciones elevadas de AMH durante el embarazo, y han demostrado que este proceso se puede impedir utilizando un antagonista de GnRH, un fármaco utilizado de manera rutinaria en protocolos de reproducción asistida.

Según el doctor Tesarik, estos descubrimientos abren "múltiples vías" al diagnóstico y tratamiento precoz del SOP, incluso antes de la aparición de los primeros síntomas. "Desde ahora, la concentración de AMH se tendría que determinar en todas las mujeres con SOP embarazadas. En casos positivos, se podrían buscar mutaciones en su receptor para GnRH", ha explicado el especialista, quien apunta que un posible tratamiento preventivo de las mujeres embarazadas con un antagonista de GnRH dependerá de que "se confirme la ausencia de posibles efectos colaterales adversos sobre el desarrollo fetal".