Inteevención de trasplante renal vivo
HOSPITAL PESET
Actualizado: jueves, 2 marzo 2017 12:06

NUEVA YORK, 2 Mar. (Reuters/EP) -

Científicos de la Universidad de Minnesota (Estados Unidos) han desarrollado un nuevo método para descongelar órganos o tejidos criopreservados sin que resulten dañados como sucede actualmente, según informan en un artículo publicado en la revista 'Science Translational Medicine'.

Aunque hasta ahora se ha conseguido preservar con éxito órganos a temperaturas ultrabajas, para poder utilizarlos posteirormente para un posible trasplante, han tenido menos éxito a la hora de descongelarlos sin causar grietas en los tejidos más frágiles.

En este caso, el sistema desarrollado se basa en un método de calentamiento que utiliza nanopartículas de óxido de hierro, que rodean a los tejidos congelados y actúan como minúsculos calentadores cuando son activados por un campo magnético externo.

Gracias a este método los investigadores fueron capaces de calentar uniformemente las válvulas y los tejidos de corazones congelados de animales sin causar ningún daño a los tejidos.

"Es el primer paso práctico para tener un banco de tejidos", ha defendido Caitlin Czajka, editor de la revista científica que ha publicado el trabajo.

Actualmente, más del 60 por ciento de los corazones y los pulmones donados cada año se pierden porque sólo pueden mantenerse en hielo durante cuatro horas antes de que empiecen a deteriorarse.

En investigaciones previas sólo había sido posible recalentar alrededor de 1 mililitro de tejido, pero en este trabajo fueron capaces de recalentar las arterias y las válvulas cardíacas en viales de 50 mililitros. Además, tras la descongelación ningún tejido resultó dañado.

"Lo que vimos es que podríamos traer estos tejidos de nuevo a ritmos muy rápidos y hemos sido capaces de mantener la viabilidad y funcionalidad de los tejidos", ha explicado John Bischof, autor de este trabajo.

Este experto reconoce que su equipo está trabajando en un estudio piloto para descongelar riñones de conejo conservados en viales de 80 mililitros, y cree que será posible ampliar la tecnología a órganos aún más grandes, aunque todavía necesitan seguir investigando antes de probarlo con órganos humanos.

Más noticias