MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Una vacuna desarrollada por científicos del Centro de Investigación de Vacunas del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos (NIAID, por sus siglas en inglés) contra virus raros pero mortales transmitidos por mosquitos ha mostrado resultados prometedores en un ensayo clínico clínico de fase 1.
En concreto, la vacuna ha resultado ser segura, bien tolerada y ha inducido una respuesta de anticuerpos neutralizantes para el virus de la encefalitis equina oriental, el virus de la encefalitis equina occidental y el virus de la encefalitis equina venezolana. El estudio aparece en 'The Lancet Infectious Diseases'.
Estos virus se transmiten a los humanos a través de las picaduras de mosquitos infectados. Los caballos también son susceptibles de infectarse, pero no pueden transmitir los virus directamente a los humanos. Las infecciones en humanos son raras, pero pueden provocar síntomas similares a los de la gripe y, en algunos casos, daños neurológicos graves o la muerte.
Los virus han causado pequeños brotes recurrentes en América del Norte, Central y del Sur, incluido un brote de encefalitis equina oriental en 2019 en el noreste de Estados Unidos que provocó 38 casos confirmados y 15 muertes.
Bajo ciertas condiciones de laboratorio, los virus pueden transmitirse a través del aire por medio de gotas de aerosol y causar infección en los seres humanos, por lo que están clasificados como patógenos prioritarios, potenciales agentes biológicos que representan un riesgo para la seguridad nacional y la salud pública.
UTILIDAD PARA PERSONAS CON RIESGO EN SUS TRABAJOS
El director del NIAID, el doctor Anthony S. Fauci, y sus colegas, han destacado la posible utilidad de una vacuna contra la encefalitis equina oriental para las personas con alto riesgo laboral de contraer la enfermedad, incluidos los miembros del ejército y los trabajadores de laboratorio.
Basándose en su exitoso desarrollo de una vacuna contra el virus de la chikungunya, los investigadores diseñaron una vacuna candidata en forma de partícula similar a un virus (VLP, por sus siglas en inglés), que utiliza las proteínas de la cubierta exterior de los virus de la encefalitis equina oriental, la encefalitis equina occidental y el virus de la encefalitis equina venezolana para provocar una respuesta inmunitaria.
Las VLP no contienen el material genético que los virus necesitan para replicarse en el interior de las células, por lo que las VLP no pueden provocar la infección.
Para el ensayo clínico de fase 1, 30 voluntarios adultos sanos de entre 18 y 50 años recibieron dosis variables de la vacuna (6, 30 o 60 microgramos) mediante inyección intramuscular. Los participantes volvieron a recibir la misma dosis como refuerzo ocho semanas después.
Algunos participantes también recibieron una formulación de la vacuna experimental que contenía un adyuvante de alumbre añadido para aumentar la respuesta inmunitaria. Los investigadores informan de que la vacuna fue segura, bien tolerada e indujo respuestas inmunitarias duraderas contra los tres virus.
La mayor respuesta de anticuerpos neutralizantes se observó en los participantes que recibieron la dosis de 30 microgramos con adyuvante. Los autores señalan que los hallazgos apoyan una mayor evaluación clínica de la vacuna candidata.
El NIAID ha concedido una licencia de comercialización para el desarrollo avanzado de la vacuna candidata a la empresa de ciencias de la vida Emergent BioSolutions de Gaithersburg, Maryland, en Estados Unidos.