No debe guardarse refrigerada durante más de tres días y congelarse durante el menor tiempo posible
VALNCIA, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
Investigadoras de la CEU UCH han analizado la capacidad antimicrobiana de la leche humana para evitar la proliferación de la bacteria Cronobacter sakazakii, que causa infecciones sistémicas, meningitis y mortalidad en los recién nacidos, según ha informado fuentes de la institución académica.
Las investigadoras de Veterinaria y Farmacia de la CEU UCH también han determinado las condiciones óptimas de conservación de la leche humana para mantener su capacidad antibacteriana: no debe guardarse refrigerada durante más de 72 horas y congelarse durante el menor tiempo posible.
Tres investigadoras de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia acaban de publicar en la revista americana de lactancia Journal of Human Lactation este estudio, el primero a nivel internacional que analiza esta propiedad.
Las profesoras Sandra Fernández Pastor, Mari Carmen López Mendoza y Dolores Silvestre Castelló, de los Departamentos de Ciencia y Tecnología de los Alimentos y de Farmacia de la CEU UCH, son las autoras de la investigación.
Al respecto, la profesora de la CEU UCH Sandra Fernández Pastor ha explicado que cada vez es más frecuente que las madres deban extraerse la leche y conservarla refrigerada para seguir alimentando con ella a sus hijos más allá del periodo de baja por maternidad, por lo que deben guardarla refrigerada o congelada.
También han aumentado los bancos de leche humana en hospitales, especialmente para alimentar a bebés prematuros con leche de madres donantes que se congela para su conservación y es sometida a distintos tratamientos previos a su administración.
Por ello, han analizado las condiciones óptimas de tratamiento de la leche humana para evitar riesgos de contaminación y garantizar que se mantienen todas sus propiedades, incluidas las antimicrobianas.
NO MÁS DE TRES DÍAS REFRIGERADA
En ese sentido, la profesora de la CEU UCH Sandra Fernández Pastor ha señalado que recientemente se han detectado casos de infección por esta bacteria en bebés que habían tomado leche humana previamente conservada. "De ahí la necesidad de estudiar las condiciones óptimas de manejo y tratamiento para evitar el riesgo de contaminación por esta bacteria, que hemos determinado también en este mismo estudio", destaca
Los resultados revelan que la conservación en frigorífico a 4C no debe prolongarse durante más de 72 horas y la congelación entre -18C y -20 también debe limitarse al máximo en el tiempo para garantizar las propiedades de la leche humana frente a la bacteria estudiada.
"Estos resultados pueden contribuir a mejorar los protocolos de conservación en bancos de leche humana de hospitales en todo el mundo, ante la falta de un protocolo internacionalmente validado todavía y también pueden facilitar el buen manejo por parte de las madres en periodo de lactancia que tengan que extraer la leche y conservarla para alimentar a sus bebés", han destacado.
MUESTRAS DE LECHE DE MADRES DONANTES
El estudio se ha realizado sobre muestras de leche materna donadas por 29 madres lactantes de la Comunita Valenciana y Murcia, para comprobar su capacidad antibacteriana frente a Cronobacter sakazakii antes y después de haber sido sometida a diversos procedimientos: conservada en refrigeración durante 72 horas, conservada en congelación durante uno, dos y tres meses, pasteurizada y sometida a tratamiento global de banco de leche humana, que incluye la aplicación de varios de estos tratamientos.
En este último caso, se realizó el análisis con y sin adición de fortificante tras la aplicación del tratamiento global. La comparación de la presencia de la bacteria en las muestras de leche materna antes y después de ser sometidas a distintas condiciones de conservación ha dado lugar a las recomendaciones para preservar mejor su capacidad antimicrobiana natural.
El Grupo de Investigación en Nutrición Humana y Seguridad Alimentaria para la Salud de la CEU UCH, que dirigen las profesoras Mari Carmen López Mendoza, del Grado en Veterinaria, y Dolores Silvestre, del Grado en Farmacia, y del que forma parte la investigadora Sandra Fernández Pastor, estudia los biocomponentes y los efectos en sus propiedades cuando la leche se dona y se conserva en bancos de leche humana en hospitales, con el objetivo de contribuir a la mejora de sus protocolos de tratamiento.
Los estudios de este equipo investigador han sido publicados en revistas científicas internacionales como International Dairy Journal, Maternal and Child Nutrition o Journal of Pediatric Gastroenterology and Nutrition.
Una parte de la investigación ahora publicada en Journal of Human Lactation fue premiada en el X Congreso Español de Lactancia Materna, celebrado el pasado año por la Asociación para la Promoción e Investigación científica y cultural de la Lactancia Materna (APILAM) entre las 173 investigaciones presentadas en formato póster.