Las dietas flexibles tienen más beneficios

Archivo - Problemas de dieta, trastorno alimentario: mujer infeliz que mira una pequeña porción de brócoli en el plato
Archivo - Problemas de dieta, trastorno alimentario: mujer infeliz que mira una pequeña porción de brócoli en el plato - RONSTIK/ ISTOCK - Archivo
Publicado: lunes, 11 marzo 2024 8:18

MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

En el nuevo libro 'Think Like A Dietitian' Joyce Patterson, dietista diplomada y especialista en educación y cuidado de la diabetes en Michigan Medicine en Ann Arbor, en Estados Unidos concluye que la flexibilidad es más sostenible que un plan de dieta rígido.

Patterson destaca que muchas dietas populares se basan en evidencia científica mínima, pero la dieta cetogénica y el ayuno intermitente son muy estudiados y debatidos entre los investigadores y médicos en nutrición. De hecho, en su libro incluye una investigación según la cual se ha demostrado que la dieta cetogénica ofrece beneficios a corto plazo en la pérdida rápida de peso y trastornos metabólicos, incluida la diabetes, pero Patterson dice que no hay suficientes estudios a largo plazo para determinar la seguridad del régimen a largo plazo.

De manera similar, las diversas formas de ayuno intermitente también han demostrado potencial como tratamientos para la obesidad y los trastornos cardiometabólicos, pero para el ayuno en días alternos o los ayunos prolongados, se necesitan más estudios para evaluar su seguridad a largo plazo.

"Cuando ciertas dietas muestren resultados prometedores en la investigación, muchos médicos bien intencionados, ajenos a la nutrición, se apresurarán a recomendar estos enfoques", explica Patterson. "Desde las dietas bajas en grasas hasta las bajas en carbohidratos y el ayuno, las dietas más populares son, irónicamente, las más restrictivas. No es de extrañar que tiendan a ser los más insostenibles".

En las dietas cetogénicas, la pérdida inicial de agua por sí sola en la primera semana puede mostrar cambios en la escala. Sin embargo, los estudios también muestran repetidamente evidencia de pérdida de peso en varios otros patrones de alimentación, independientemente de la composición de macronutrientes, sin que ninguno de ellos demuestre ser más superior a los demás. Con respecto al mantenimiento de la pérdida de peso, Patterson explica que "las investigaciones continúan mostrando poca diferencia al comparar varios patrones dietéticos para la pérdida de peso a largo plazo".

Otra práctica común es que las personas apliquen ciertas características de una dieta, en lugar del patrón dietético real que se investigó. Según la dietista, sin una orientación adecuada, las personas pueden terminar practicando comportamientos poco saludables que ponen en riesgo su salud.

Seguir las tendencias dietéticas también puede crear una actitud que Patterson llama "todo o nada". Ella explica: "Muchas personas son bastante conocedoras de las tendencias dietéticas. Se mantienen al día con las últimas tendencias y están dispuestos a probar cosas nuevas. Se familiarizan con términos como "macros" o "alcalinidad" o "cetonas". Cuando se lo proponen, pueden perder peso con bastante rapidez. Saben cómo adelgazar para una boda, un crucero o unas vacaciones en la playa. Cuando están listos, se sumergen y ven los resultados".

Sin embargo, Patterson explica que cuando sucede algo inesperado, como un evento social, un problema familiar, un problema de salud o un evento estresante, a menudo estas personas que hacen dieta de "todo o nada" llegan a un estancamiento inevitable, se frustran y se dan por vencidos.

"La vida pasa. Y sucederá una y otra vez. Estos son quizás los desafíos más impactantes que enfrentan las personas porque son recurrentes e inevitables. Pueden ir acompañados de una carga emocional como estrés o preocupación. O el episodio puede ir seguido de sentimientos de culpa o fracaso, especialmente en aquellos cuya autoeficacia era baja en primer lugar. Si esto sucede repetidamente, puede parecer que el costo del esfuerzo supera el beneficio, lo que lleva a un cese total de la acción. Con demasiada frecuencia, este ciclo de regresión se repite", explica.

Tanto la investigación como la experiencia de Patterson sugieren que la mayoría de las dietas funcionan porque, independientemente de si controlan las calorías, los carbohidratos, las grasas, o las proteínas por lo general se aplican algunos conceptos básicos, como controlar el azúcar añadido y los alimentos ultraprocesados. Por otra parte, aumentan los alimentos vegetales y las porciones están controladas.

Finalmente, Patterson sugiere que seguir una regla '80/20'. Esta regla general sugiere que las personas sigan las recomendaciones dietéticas el 80% del tiempo y no se preocupen por el otro 20%, teniendo en cuenta la conveniencia, el disfrute y las interacciones sociales.