MADRID 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
Una dieta rica en verduras, legumbres, frutos secos y baja en lácteos y carne puede tener un efecto protector contra el COVID-19, según una investigación realiaza por investigadores brasileños que ha sido publicada en la revista 'BMJ Nutrition Prevention & Health'. En concreto, el trabajo señala que las dietas vegetarianas se relacionan con un 39% menos de probabilidades de contraer COVID-19.
Se trata de un trabajo de investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sao Paulo (Brasil) y de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Federal da Grande Dourados (Brasil).
Varios estudios han sugerido que la dieta puede tener un papel importante en la evolución de la infección por COVID-19, así como en los factores que aumentan el riesgo de sus complicaciones asociadas. Por lo tanto, los investigadores se propusieron evaluar el impacto potencial de los patrones dietéticos en la incidencia, gravedad y duración de la infección por COVID-19 entre 702 voluntarios adultos, todos los cuales fueron reclutados entre marzo y julio de 2022.
Los participantes fueron encuestados sobre sus patrones alimentarios habituales y la frecuencia de los grupos de alimentos, así como sobre su estilo de vida y su historial médico, incluida la vacunación contra la COVID-19. Luego se dividieron en grupos dietéticos omnívoros (424) o predominantemente vegetales (278). El grupo de alimentos de origen vegetal se dividió a su vez en flexitarianos/semi-vegetarianos que comían carne 3 o menos veces por semana (87); y vegetarianos y veganos (191).
Así, aquellos que informaron seguir dietas predominantemente vegetales o vegetarianas comían habitualmente más verduras, legumbres y frutos secos, y menos o nada de lácteos y carne. No hubo diferencias significativas en el sexo, la edad o la vacunación entre los grupos de omnívoros y de plantas. Pero un número significativamente mayor de personas había recibido educación de posgrado.
Los omnívoros también informaron una tasa más alta de condiciones médicas y tasas más bajas de actividad física. Y la prevalencia de sobrepeso y obesidad fue significativamente mayor entre los omnívoros, todos factores asociados con un mayor riesgo de infección por COVID-19 y síntomas/complicaciones más graves.
En total, 330 personas (47%) dijeron haber tenido infección por COVID-19. De ellos, 224 (32%) dijeron que tenían síntomas leves y 106 (15%) síntomas de moderados a graves.
Según los resultados, los omnívoros tuvieron una incidencia significativamente mayor de COVID-19 que los grupos con dietas basadas en plantas: 52% frente a 40%. Y tenían más probabilidades de haber tenido una infección de moderada a grave: el 18% frente a poco más del 11%. Sin embargo, no hubo diferencia en la duración de los síntomas.
Después de tener en cuenta factores potencialmente influyentes, como el peso, las afecciones médicas preexistentes y los niveles de actividad física, no hubo diferencias generales en la gravedad de los síntomas entre los grupos de omnívoros y los de dieta basada en plantas. Pero aquellos que seguían una dieta predominantemente basada en plantas o vegetariana/vegana tenían un 39% menos de probabilidades de infectarse que los omnívoros.
Respecto a las conclusiones, se debate si sería posible que las dietas predominantemente basadas en plantas proporcionen más nutrientes que estimulen el sistema inmunológico y ayuden a combatir las infecciones virales. "Los patrones dietéticos basados ??en plantas son ricos en antioxidantes, fitoesteroles y polifenoles, que afectan positivamente a varios tipos de células implicadas en la función inmune y exhiben propiedades antivirales directas", escriben.
No obstante, este es un estudio observacional y, como tal, no puede establecer factores causales. Los investigadores también reconocen que el estudio se basó en recuerdos personales y evaluaciones subjetivas, los cuales son propensos a errores.
Sin embargo, concluyen: "A la luz de estos hallazgos y los de otros estudios, y debido a la importancia de identificar los factores que pueden influir en la incidencia de COVID-19, recomendamos la práctica de seguir dietas basadas en plantas o patrones dietéticos vegetarianos".
"Esta investigación se suma a la evidencia existente, lo que sugiere que la dieta puede tener un papel en la susceptibilidad a la infección por COVID-19", comenta Shane McAuliffe, asociado académico visitante senior del NNEdPro Global Institute for Food, Nutrition and Health, copropietario de 'BMJ Nutrition, Prevención y Salud'.
"Pero esta sigue siendo un área de investigación que justifica una investigación más rigurosa y de alta calidad antes de que se puedan sacar conclusiones firmes sobre si determinados patrones dietéticos aumentan el riesgo de infección por COVID-19", añade.