'Autodieta' y síntomas del síndrome de intestino irritable: sin supervisión médica pueden ser negativas para la salud

Archivo - Hombre con dolor de intestino.
Archivo - Hombre con dolor de intestino. - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / THARAKORN - Archivo
Publicado: viernes, 18 julio 2025 16:56

MADRID 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

La especialista del Departamento de Digestivo de la Clínica Universidad de Navarra, la doctora Maite Alonso, ha advertido de que realizar cambios dietéticos sin previa indicación médica ante síntomas del síndrome de intestino irritable pueden ser "negativos" para la salud.

"Es muy común que, cuando los pacientes llegan a consulta, ya hayan excluido ciertos grupos de alimentos para mejorar sus síntomas. Sin embargo, hacer modificaciones o restricciones dietéticas sin una indicación médica y sin la supervisión profesional puede tener consecuencias negativas para la salud", ha afirmado Alonso.

La llegada del verano hace que aumenten los cambios de hábitos alimentarios y los intentos de seguir dietas que "prometen" mejorar la salud o el bienestar físico pero que, sin supervisión profesional, pueden suponer un riesgo, motivo por el que la experta ha insistido en que acudir a profesionales con experiencia permite garantizar un tratamiento seguro, eficaz y adaptado, especialmente ante síntomas del síndrome de intestino irritable.

Este trastorno se diagnostica a partir de síntomas como el dolor abdominal recurrente y las alteraciones del ritmo intestinal, tales como diarrea, estreñimiento o ambos de forma alternante, durante al menos tres meses.

"Los trastornos del eje intestino-cerebro no tienen una única causa. En su origen y evolución influyen factores biológicos, emocionales y de estilo de vida, por lo que el abordaje debe contemplar todas estas dimensiones", ha expresado Alonso.

Es por ello por lo que la especialista ha insistido en la importancia de adaptar la dieta a los síntomas y necesidades concretas de cada paciente, algo "clave" para aliviar las molestias digestivas y mejorar su bienestar.

Entre las principales estrategias a seguir para este síndrome se encuentra la dieta baja en carbohidratos de cadena corta, que se absorben de manera deficiente en el intestino delgado y que, al llegar al colon, son fermentados por bacterias intestinales, produciendo gases y atrayendo agua.

Este tratamiento, que se estructura en una fase de restricción de entre cuatro y ocho semanas, de reintroducción gradual para evaluar la tolerancia, y de personalización en base a la respuesta, debe aplicarse desde el conocimiento de la historia clínica, con un buen seguimiento profesional y una duración limitada para prevenir déficits nutricionales u otros efectos indeseados.

"La implicación activa del paciente, la educación sanitaria, el acompañamiento cercano y la aplicación de estrategias basadas en la evidencia científica son la base para avanzar hacia el bienestar digestivo real y duradero", ha concluido la experta, subrayando que este tipo de tratamientos tienen como objetivo mejorar la calidad de vida del paciente.

Contador