MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
El agua es esencial para la vida. Es el componente principal de los seres humanos, representa el 60 por ciento del peso de una persona y también es un nutriente esencial para el equilibrio vital del organismo. No obstante, el cuerpo humano no puede almacenar agua, por lo que la pierde constantemente por la respiración, el sudor, la orina o las heces. Se estima que al día se pierden 2,5 litros de agua.
No obstante, el Instituto de Investigación Agua y Salud indica que el 75 por ciento de los españoles no alcanzan las recomendaciones sobre ingesta diaria de agua propuestas por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y la Organización Mundial de la Salud. En España, el 82 por ciento de los españoles considera que se hidrata correctamente, pero en realidad sólo un 21 por ciento bebe la cantidad de agua que debería.
En el caso de la infancia la situación no es halagüeña. El V Observatorio Nestlé de Hábitos de Vida Saludable y Estilo de Vida de las Familias revela que casi un 10 por ciento de los pequeños de entre 4 y 12 años no bebe agua en la comida del mediodía. Durante la cena, el 15 por ciento tampoco la toma como bebida principal.
"Es importante que el agua sea la bebida principal de hidratación, tanto en las comidas como entre horas y es muy importante inculcar ese hábito en los niños desde bien pequeños. Los hábitos que se inculquen de niños son los que perdurarán en la edad adulta", ha explicado la responsable de Nutrición de Nestlé España, Laura González.
Entre las principales funciones del agua, el Instituto de Investigación Agua y Salud destaca:
- Actúa como lubricante.
- Mantiene la salud celular.
- Facilita la distribución de nutrientes.
- Participa en la eliminación de residuos.
- Regula la temperatura corporal.
- Es vital para el correcto funcionamiento de los órganos.
- Previene la obesidad.
El experto en Ejercicio y Obesidad de la Universidad de Leeds (Inglaterra), el profesor Paul Gately, ha indicado en su conferencia durante el curso 'Hidratación saludable', organizado por la Universidad de Navarra y el Basque Culinary Center y con la colaboración de Nestlé, que beber agua está entre los hábitos saludables clave que previenen la obesidad.
"El agua es esencial para nuestra supervivencia y, desde una perspectiva energética, no contiene calorías, por lo que debería ser la principal fuente de consumo de líquidos", ha dicho. "Ninguna otra bebida es tan importante para prevenir el aumento de peso o tratar de controlarlo", ha resumido.
EL MECANISMO DE LA SED
La nutricionista de Nestlé también ha querido recordar el mecanismo de la sed, sensación que aumenta su incidencia durante el período estival y las altas temperaturas.
Ha apuntado que es un sistema que cubre las necesidades de agua con eficiencia en adultos sanos, pero no en niños o personas mayores. "Por diferentes factores fisiológicos, este mecanismo no basta para alcanzar con seguridad el balance hídrico en ellos", ha explicado.
Por ello, ha incidido en que "es muy importante ofrecer agua a menudo a estos colectivos" y ha recomendado "llevar un botellín de agua antes de salir de casa o hacer una excursión".