MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los últimos resultados del estudio 'OlympiA' demuestran un aumento de la supervivencia en pacientes con mutaciones germinales en el gen BRCA y con cáncer de mama precoz de alto riesgo. Olaparib, un fármaco dirigido, administrado como tratamiento adyuvante reduce un 32 por ciento el riesgo de muerte en estos pacientes con una mediana de seguimiento de 3,5 años.
Los resultados han sido presentados por el doctor Andrew Tutt, investigador principal del estudio, esta tarde en una sesión plenaria virtual de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO, por sus siglas en inglés), actualizando los datos presentados en junio de 2021 que ya demostraban una reducción del 42 por ciento en el riesgo de recaída en pacientes con mutaciones BRCA1 y BRCA2 -genes implicados en el desarrollo del cáncer de mama hereditario-.
"'OlympiA' demuestra que olaparib reduce el riesgo de reaparición del cáncer y aumenta la supervivencia global en pacientes con una variante patogénica hereditaria en los genes BRCA1 o BRCA2. Este beneficio clínico es independiente del estado de los receptores hormonales de su tumor. Estos datos pueden marcar un antes y un después en el tratamiento de estas pacientes porque ofrecen la posibilidad de una curación" afirma la doctora Judith Balmaña, investigadora del estudio y representante de SOLTI en el comité de dirección del mismo, responsable del Grupo de Genética del Cáncer y miembro de la Unidad de Cáncer de Mama del Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO).
El doctor Eduardo Martínez de Dueñas, del Hospital Provincial de Castellón (Castellón de la Plana), miembro de GEICAM e investigador del estudio, formando parte de su comité de dirección en nombre del grupo, destaca, además de la eficacia de olaparib, su limitada toxicidad, "muy fácilmente manejable en la práctica clínica".
"Es difícil conseguir avances relevantes en supervivencia global en el tratamiento adyuvante del cáncer de mama precoz, y olaparib es el primer fármaco con el que podremos contar para este subgrupo de pacientes con mutación en BRCA1 o BRCA2 tanto en triple negativo como en enfermedad hormonosensible de alto riesgo", destaca.
Estos resultados han impulsado ya la aprobación del fármaco por parte de las autoridades sanitarias americanas el pasado viernes para esta población de pacientes y en el contexto adyuvante, lo que supone un cambio en la práctica clínica.
El tratamiento ya estaba aprobado en el contexto metastásico y ahora ha conseguido la indicación en fases iniciales de la enfermedad. Además, varias guías internacionales de referencia como la de Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inlgés) y el Consenso Internacional de St Gallen han actualizado sus recomendaciones para el tratamiento adyuvante de pacientes con cáncer de mama hereditario precoz de alto riesgo.
OLAPARIB EN ADYUVANCIA MEJORA LA SUPERVIVENCIA GLOBAL
Los resultados de este segundo análisis demuestran una mejora tanto estadística como clínicamente significativa en la supervivencia global (SG) tras un año de olaparib adyuvante en comparación con el placebo (reducción de un 32 por ciento el riesgo de muerte).
A los 4 años la tasa de SG fue del 89,8 por ciento para los pacientes tratados con olaparib frente al 86,4 por ciento para los que recibieron placebo. En cuanto a la supervivencia libre de enfermedad invasiva y la supervivencia libre de enfermedad a distancia, se mantienen las mejoras anteriormente comunicadas con beneficios similares.
Los resultados del primer análisis intermedio del ensayo 'OlympiA' se presentaron en junio de 2021 en la Reunión Anual de ASCO y se publicaron simultáneamente en la revista científica 'The New England Journal of Medicine'.
Con este nuevo fármaco dirigido, la determinación de variantes patogénicas en los genes BRCA1 y BRCA2 pasa de ser solo un marcador genético de riesgo familiar a un biomarcador predictivo de la respuesta al tratamiento con olaparib, que puede ser útil para cada paciente de forma individual, apuntan la doctora Balmaña y el doctor Martínez de Dueñas.
Ambos consideran que los análisis genéticos para determinar posibles alteraciones en estos genes van a cobrar protagonismo en la toma de decisiones sobre el tratamiento a pautar, especialmente en la enfermedad triple negativa, donde sólo se dispone de la quimioterapia como única alternativa sistémica que permita tratarla y llevar a cabo un control efectivo de la enfermedad.
Ocho de cada diez participantes en dicho ensayo de fase III padecían el subtipo triple negativo, que, a diferencia de otros subtipos de cáncer de mama como el luminal con receptores hormonales positivos (70 por ciento de todos los casos) o el HER2 positivo (15 por ciento), representa un grupo muy heterogéneo falto de avances comparables a los producidos en los últimos años en los otros dos subtipos de tumores.
El triple negativo es el subtipo más frecuente en pacientes con cáncer de mama hereditario (que a su vez representa entre el 5 y el 10 por ciento del total de todos los casos de cáncer de mama), objeto de estudio del 'OlympiA'.
DESTACADA PARTICIPACIÓN ESPAÑOLA EN EL ESTUDIO 'OLYMPIA'
En el estudio 'OlympiA' participan un total de 1.836 pacientes. España se encuentra en el sexto puesto de países que más pacientes han aportado al estudio, junto con Polonia y por detrás de China, Estados Unidos, Alemania, Francia y Japón, con más de un centenar de pacientes reclutados en 40 centros españoles, a través de GEICAM y SOLTI, que también ha gestionado el estudio en Portugal.
Este estudio internacional, en el que han participado 23 países, ha sido posible gracias a una alianza entre el ámbito académico y la industria farmacéutica y ha contado con destacada participación española.
Los grupos cooperativos Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama y SOLTI, pertenecientes al Breast International Group (BIG), coordinador de la investigación, han reclutado a más de un centenar de pacientes, cerca del 6 por ciento total. El ensayo se ha desarrollado en asociación con NRG Oncology, el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos (NCI), la Frontier Science & Technology Research Foundation (FSTRF), AstraZeneca y MSD.