Las enzimas intestinales descomponen fármacos como la 'levodopa'

Algunos antidepresivos podrían usarse como tratamiento para múltiples enfermedades infecciosas
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Publicado: viernes, 14 junio 2019 12:54

MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard (EE.UU) ha concluido que los microbios intestinales descomponen fármacos como la 'levodopa', un tratamiento utilizado para paliar la enfermedad del Parkinson, lo que supone una nueva visión sobre como el microbioma afecta a la salud.

El estudio, publicado en 'Science', ha puesto de relieve que el metabolismo microbiano, además de ayudar a la descomposición de los nutrientes y alimentos, puede suponer efectos negativos para la salud, ya que estos microbios intestinales pueden consumir los medicamentos ingeridos, ha destacado Maini Rekdal, primer autor del estudio.

Para su desarrollo, los investigadores se centraron en el uso de 'levodopa' y observaron qué bacterias consumen este fármaco, con el objetivo de evaluar cómo frenar esta actividad. En este sentido, descubrieron que la bacteria intestinal 'enterococcus faecalis' es el principal microbio que produce dicha degradación.

La 'levodopa' supone el tratamiento más utilizado para el Parkinson, ya que facilita dopamina al cerebro aliviando los temblores de esta patología, sin embargo, solamente llega al cerebro entre un 1 y 5 por ciento de esta medicación. De este modo, las enzimas convierten la 'levodopa' en dopamina en el intestino, lo que puede provocar efectos secundarios como dolor gastrointestinal severo y arritmias cardíacas.

Este número puede variar en función de las características de cada paciente. Pero a pesar de ello, el estudio ha concluido que las enzimas del cuerpo pueden descomponer este fármaco en el intestino, evitando su correcta llegada al cerebro. Frente a estos hallazgos, se introdujo otro medicamento, 'carbidopa', para bloquear este metabolismo, ya que esta no es afectada por las células microbianas y puede evitar que el fármaco anterior interactúa con las enzimas bacterianas.

De este modo, Rekdal ha concluido que estos hallazgos podrían suponer un punto de partida para el desarrollo de nuevos fármacos que permitan mejorar la terapia de 'levodopa' en aquellos pacientes que sufren Parkinson.