La eficacia de los nuevos fármacos de la hepatitis C también supera el 90% en pacientes coinfectados con VIH

Imágenes de la Hepatitis C
CNB-CSIC
Publicado: martes, 20 febrero 2018 14:38

MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un estudio realizado en Madrid ha constatado que el 92 por ciento de los pacientes con pacientes coinfectados con hepatitis C y VIH han logrado curarse del virus hepático tras los nuevos tratamientos antivirales de acción directa aprobados en los últimos años.

Así se desprende de los resultados de un estudio liderado por investigadores del Grupo de Estudio del Sida (Gesida) de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) que ha publicado recientemente la revista 'Hepatology'.

Según los autores, uno de los hechos más relevantes de este trabajo es que es la mayor experiencia en mundo real sobre el tratamiento con estos nuevos tratamientos en personas coinfectadas, dado que los pacientes que se incluyen en estudios clínicos se seleccionan de forma rigurosa y reúnen unas características muy favorables.

Los pacientes estudiados fueron seleccionados del Registro de Utilización de Agentes Antivirales para el Virus de la Hepatitis C (RUA-VHC) del Servicio Madrileño de Madrid, en donde se recoge, de forma prospectiva, toda la información clínica de los pacientes que reciben tratamiento frente en esta comunmidad desde noviembre de 2014.

Para este estudio concreto, se ha utilizado toda la información disponible de los primeros 2.639 pacientes coinfectados que habían iniciado tratamiento hasta agosto de 2016.

Los pacientes eran mayoritariamente hombres tal y como corresponde a la epidemiología de la coinfección en nuestro entorno y tenían una edad media de 50 años. Hay que destacar que el 41 por ciento tenía cirrosis hepática (el 7% descompensada).

Junto con el dato conocido de la curación de la infección (92%), cabe reseñar que menos del 1 por ciento tuvieron que suspender el tratamiento debido a acontecimientos adversos.

Los factores que se asociaron con mayor probabilidad de fracaso al tratamiento fueron el sexo masculino, el haber padecido con anterioridad una enfermedad definitoria de sida, la cifra baja de linfocitos T CD4+, las concentraciones altas del VHC en sangre, la presencia de cirrosis (especialmente en situación de descompensación), y el uso de algunos regímenes de AAD considerados subóptimos hoy en día.

"La introducción de los antivirales de acción directa frente al virus de hepatitis C ha sido uno de los principales avances en medicina clínica en las últimas décadas", consideran Juan Berenguer (Hospital General Universitario Gregorio Marañón) y Juan González (Hospital Universitario La Paz), coordinadores de este trabajo.