CC.OO. critica incumplimiento del convenio en un sector en el que el 75% de trabajadoras tiene dolor
BARCELONA, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un estudio de CC.OO. ha detectado un incremento del uso de psicofármacos en trabajadoras del sector de la Dependencia como consecuencia de las condiciones laborales en el Estado: "Hay una carga de trabajo brutal, en general porque las plantillas no están ajustadas, son exiguas. Hay una presión de tiempos enorme".
Lo ha explicado en declaraciones a Europa Press el miembro de la Secretaría de Salud Laboral de la Confederación Sindical de CC.OO. José Rodríguez, que ha alertado de que estas condiciones generan que "más de tres de cada cuatro de las trabajadoras refieren dolor en diversas partes de su cuerpo, tanto es así que acaban teniendo que utilizar analgésicos" y antiinflamatorios.
"La situación se mantiene, el problema no se ataja, solo se atajan los síntomas, y lo que empieza a suceder es que hay estrés, hay alteraciones del sueño, hay ansiedad, hay sensación de no terminar nunca la tarea", y se acaban utilizando los psicofármacos, ante lo que han impulsado una campaña para concienciar contra su consumo en colectivos como limpiadoras, gerocultoras y enfermeras.
En este trabajo del sindicato, de tipo cualitativo, han detectado que las trabajadoras siguen este circuito y sin solución, porque no se ataja el verdadero problema, y además, se va aumentando la potencia de los fármacos, que tienen efectos secundarios, y que en el caso de los psicofármacos producen adicción.
La responsable de Salud Laboral y Empleo de la Federación de Sanidad, Irene Álvarez, ha explicado que proponen "medidas preventivas, tener en cuenta las cargas de trabajo, riesgos ergonómicos, lesiones musculoesqueléticas, evaluaciones de riesgo psicosocial" y otras medias para frenar la ansiedad, el estrés y conseguir centros de trabajo más justos, saludables y democráticos.
11,1% EN MUJERES
Según un estudio periódico del plan nacional sobre drogas, el consumo de psicofármacos en el sector pasó del 5,7% en 2008 --parecido a la media de la población general--, que creció en 2014 al 8,6% de media, que es del 4,9% en varones y del 11,1% en mujeres.
Al detectar este incremento en estos sectores muy feminizados --en el de la Dependencia, el 86% son mujeres--, la Federación de Sanidad y Sociosanitarios y la Secretaría Confederal de Salud Laboral del sindicato decidieron contrastar la información y crearon grupos discusión en diez lugares del Estado y han entrevistado a delegados, servicios de prevención de empresas y servicios de atención primaria, y presentan sus conclusiones a delegados sindicales estos meses.
Ha indicado que el estudio se ha realizado en el sector privado, en el que hay peores condiciones que en el público y son dos realidades difícilmente comparables, y ha añadido que las empresas son conocedoras del proyecto, pero "poco les importa que los síntomas se traten a través de la medicación siempre y cuando vayan a trabajar".
El sector privado se regula por un convenio estatal, pero "hay un incumplimiento del convenio flagrante, la ley de prevención de riesgos laborales brilla por su ausencia, las residencias están trabajando como hace 50 años, no ha habido ningún tipo de innovación", ha dicho Álvarez.
De hecho, en muchas sigue habiendo camas de patas fijas, por lo que las trabajadoras deben levantar a peso a los ancianos: "O en este sector se invierte, o sino no sé quien va a quedar para cuidar a nuestros mayores", ha lamentado.