MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
La migración de Europa durante el periodo colonial impulsó la propagación de la cepa dominante de la tuberculosis que se ve hoy en día, el linaje 4, según informa un estudio reciente. Pero la farmacorresistencia a esta enfermedad infecciosa evolucionó de manera independiente en varias regiones varias veces, sugiere este trabajo, con poca difusión internacional después de la evolución independiente de la enfermedad.
La forma más común de 'Mycobacterium tuberculosis' (TB) se originó en Europa y se extendió a Asia, África y las Américas con exploradores y colonialistas europeos, según revela un nuevo estudio dirigido por 'University College London' (UCL), en Reino Unido, y el Instituto Noruego de Salud Pública.
La tuberculosis cobra más vidas que cualquier otra enfermedad infecciosa y, aunque su carga global ha disminuido lentamente durante la última década, el aumento de la resistencia a los antibióticos (ABR, por sus siglas en inglés) representa un obstáculo importante para su control.
El estudio, publicado este miércoles en 'Science Advances', es el análisis genómico más completo hasta la fecha de la forma más generalizada de TB, llamada linaje 4 TB, y aumenta significativamente nuestra comprensión del origen y la posterior propagación de la forma más común de TB.
El equipo también hizo un mapa de la evolución de las cepas resistentes a los medicamentos para investigar los mecanismos de ABR y encontró que las cepas resistentes a los medicamentos de linaje 4 TB apenas se han propagado más allá del país en el que se originaron más recientemente.
"Nuestros hallazgos sugieren que, al menos para el linaje 4, la resistencia a los antibióticos es un desafío local presente en múltiples países y regiones, pero con una mínima propagación entre ellos. Por lo tanto, los países que logren detener la transmisión de cepas resistentes dentro de su territorio deben esperar una disminución masiva de la tuberculosis farmacorresistente", explica el autor Vegard Eldholm, de la División de Control de Infecciones y Salud Ambiental del Instituto Noruego de Salud Pública y, anteriormente, miembro del Instituto de Genética de la UCL.
"Esto no quiere decir que no debamos preocuparnos de la propagación internacional de cepas resistentes, ya que estos patrones podrían cambiar en el futuro, especialmente si la carga de resistencia a los antibióticos sigue creciendo", advierte este investigador.
Para el estudio, los científicos analizaron secuencias genómicas de 1.669 muestras del linaje 4 de tuberculosis tomadas en diferentes momentos de Europa, África, Sudeste de Asia, América del Sur y América del Norte. Estas incluyen muestras tomadas de momias de cientos de años hasta el día de hoy. Cada cepa de TB se colocó en un árbol genealógico de la familia y su ubicación fue mapeada geográficamente a lo largo del tiempo.
De los siete linajes de TB, solo los linajes 2 y 4 son verdaderamente globales en su distribución, probablemente reflejando una combinación de migraciones humanas pasadas y su transmisión más efectiva en relación con los otros linajes. Estudios anteriores han demostrado que el ancestro de todos los linajes de TB evolucionó en África hace entre 4.000 y 6.000 años y se dispersó fuera del continente hacia el resto del mundo.
UN LINAJE DE LA TB ENTRÓ EN ÁFRICA EN EL SIGLO XV POR LA REPÚBLICA DEL CONGO
Los nuevos resultados demuestran que el linaje 4 surgió posteriormente en Europa hace alrededor de mil años antes de convertirse en la forma de TB globalmente dominante. Muestran que las introducciones más tempranas del linaje 4 en África ocurrieron en la República del Congo en el siglo XV antes de extenderse por todo el continente a Sudáfrica, Uganda y Malawi a fines del siglo XVII.
Esto refleja fielmente la historia colonial europea en África al sur del Sáhara con los primeros fuertes portugueses y puestos comerciales establecidos en la Costa de Oro (la actual Ghana) en 1482, a la que siguió la expansión colonial europea y la migración interna africana.
"En África occidental, el linaje 4 es la forma dominante de TB, pero los linajes 5 y 6 también son comunes. Estos linajes causan una menor carga de enfermedad y no se transmiten tan bien. Es probable que con la llegada del linaje 4 europeo reemplazando linajes menos agresivos en esta región, la TB se volvió mucho más común y virulenta", argumenta el coautor del estudio Francois Balloux, profesor en el Departamento de Genética, Evolución y Medio Ambiente de UCL.
El documento demuestra además que los europeos trajeron la TB a Sudamérica relativamente poco después de la llegada de los europeos al continente en 1492, con un marcado aumento del linaje 4 a fines del siglo XVII. Los primeros eventos de migración a América del Norte ocurrieron alrededor del siglo XVI.
Al fechar y cartografiar la aparición de todas las mutaciones genéticas comunes que causan resistencia a los antibióticos, encontraron que surgieron mutaciones de resistencia específicas a los medicamentos poco después de la introducción de cada clase de antibióticos utilizados para tratar la TB, como la isoniazida, la rifampicina, la kanamicina y las fluoroquinolonas.
La rápida aparición de mutaciones de resistencia a los antibióticos no es en sí misma sorprendente; sin embargo, el equipo no identificó ningún evento de una cepa resistente del linaje 4 de la TB que se extendiera más allá del país donde surgió inicialmente, lo que sugiere que la propagación de la resistencia a los antibióticos tiende a ocurrir principalmente a escala regional.
"El mapeo exitoso de la migración pasada en este nivel de detalle es un primer paso clave para comprender la propagación de la enfermedad con el fin de predecir qué sucederá a continuación, que es el objetivo final", concluye el doctor Eldholm.