MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las personas sedentarias que piensen en practicar un deporte en verano deben dosificar las sesiones antes de comenzar el ejercicio físico pleno, ya sean personas sanas o en riesgo, para evitar lesiones, tal y como ha explicado el especialista en Medicina del Deporte del Hospital Universitario Puerto Real de Cádiz y portavoz de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF), Ángel León.
El doctor León ha señalado que los colectivos en riesgo, como fumadores, diabéticos e hipertensos, también deben realizarse una revisión médica antes de comenzar una actividad deportiva. En general, se debe dosificar el ejercicio físico para evitar lesiones musculoesqueléticas y realizar una fase de calentamiento de dosificación durante dos días antes de la realización plena del ejercicio.
Además, desde SERMEF han recomendado realizar un incremento progresivo de la intensidad del ejercicio, planificando una fase de calentamiento seguida de una fase de entrenamiento aeróbico con ejercicios de tonificación y fuerza. Al acabar, es fundamental una última fase de vuelta a la calma con ejercicios respiratorios, de relajación y estiramientos.
Para mantener unos hábitos de vida saludables, una persona adulta debe realizar unos 150 minutos de actividad aeróbica moderada a lo largo de la semana y series de ejercicios de tonificación dos veces en semana. El deporte también sirve, según León, como "arma preventiva para reducir la incidencia de algunas patologías como el ictus, enfermedades cardiovasculares o diabetes. En definitiva, mejora la esperanza de vida".
AL AIRE LIBRE, FUERA DE LAS HORAS DE CALOR
Para evitar golpes de calor y posibles deshidrataciones, se recomienda realizar deporte fuera de las horas de calor y consumir gran cantidad de agua antes, durante y después del ejercicio físico. Además, es aconsejable utilizar ropa ligera, transpirable y acorde con el deporte que se practica, de forma que no se genere una sudoración excesiva y molesta.
El calentamiento es muy importante, al igual que no interrumpir el ejercicio de forma brusca, intercalando períodos de marcha o trote de 5 a 10 minutos. León también ha recomendado consumir alimentos ligeros 90 minutos antes de iniciar el deporte, como leche, zumos y cereales que proporcionen un aporte calórico adecuado.
Los deportes acuáticos son los grandes protagonistas del ejercicio físico al aire libre en verano y también son uno de los más peligrosos. Para evitar lesiones medulares por zambullidas, desde SERMEF han recomendado asegurarse bien de la profundidad del fondo y evitar lanzarse de cabeza, especialmente si las aguas están muy turbias. Ante una posible lesión medular, lo más importante es avisar a los servicios sanitarios y trasladar a la persona afectada fuera de la zona de peligro moviendo el cuerpo en bloque, de forma que no se produzcan más lesiones.