Los antecedentes familiares, un factor de riesgo para padecer Hérpes Zóster

Hérpes Zóster
Foto: FLICKR / ROSMARIE VOEGTLI
Actualizado: jueves, 20 agosto 2015 11:52

   MADRID, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -

   Los antecedentes familiares son un nuevo factor de riesgo de padecer el Hérpes Zóster (HZ), una enfermedad vírica frecuente provocada por la reactivación del virus varicela zóster, el que causa la varicela que se queda en el organismo de forma latente tras padecerla, y que con el aumento de la edad se puede reactivar y provocar un Hérpes Zoster.

   Recientes estudios han demostrado que los antecedentes afectan, pero también existen otros factores de riesgo que están relacionados como son la edad avanzada, la presencia de enfermedades crónicas como el EPOC o la diabetes, las enfermedades reumáticas, la depresión mental y el hipotiroidismo.

   VACUNA CONTRA EL HÉRPES ZOSTER

   Desde octubre de 2014, en España está disponible la vacuna para la prevención del HZ para las personas mayores de 50 años y para las personas que presenten factores de riesgo, siendo la peor complicación de quién esté infectado la Neuralgia Postherpética (NPH).

   Asimismo el 95 por ciento de los adultos han superado la varicela y por lo tanto puede padecer esta enfermedad vírica debilitante, de la que cada año aparecen en España 190.000 casos.

   Sin embargo, el Hérpes Zóster puede desembocar en NPH, una complicación más grave que consiste en un dolor neurálgico continuo en el "área de erupción cutánea" y que puede durar meses o años por el deterioro del nervio por el que el virus viaja hasta llegar a la piel.

   El 74 por ciento de los casos y el 25 por ciento de las hospitalizaciones por el HZ lo padecen personas mayores de 25 años, frente al 52 por ciento de las hospitalizaciones de las personas mayores de 64 años que representan un 16 por ciento de los casos más graves.

   Su prevención está recomendada por sociedades científicas y recogidas en un Documento de Consenso con el objetivo de "facilitar la identificación del HZ en la práctica clínica, mejorar su diagnóstico y tratamiento y prevenir su aparición, de forma que se reduzca el impacto negativo sobre la salud y la calidad de vida de los ciudadanos".