El virus de la Covid-19 puede permanecer en el cuerpo más de un año después de la infección

Archivo - Niño de enfermedad triste en cuarentena domiciliaria. El chico y su osito de peluche se sienta en el alféizar de la ventana y mira por la ventana. Protección del virus, pandemia de coronavirus, epidemia de prevención.
Archivo - Niño de enfermedad triste en cuarentena domiciliaria. El chico y su osito de peluche se sienta en el alféizar de la ventana y mira por la ventana. Protección del virus, pandemia de coronavirus, epidemia de prevención. - GARGONIA/ISTOCK - Archivo
Publicado: miércoles, 3 abril 2024 18:02

MADRID 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

El virus de la Covid-19 puede persistir en la sangre y los tejidos de los pacientes durante más de un año después de que haya finalizado la fase aguda de la enfermedad, según una nueva investigación de la Universidad de California- San Francisco (Estados Unidos), que ofrece posibles pistas sobre por qué algunas personas desarrollan Covid persistente.

Los científicos hallaron fragmentos del SARS-CoV-2, denominados antígenos Covid, que permanecían en la sangre hasta 14 meses después de la infección y durante más de dos años en muestras de tejido de personas que habían padecido Covid.

"Estos dos estudios proporcionan algunas de las pruebas más sólidas hasta la fecha de que los antígenos del Covid pueden persistir en algunas personas, aunque pensemos que tienen respuestas inmunitarias normales", ha afirmado el doctor Michael Peluso, investigador de enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina de la UCSF, que dirigió ambos estudios.

Los hallazgos se presentaron en la Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas (CROI), que se celebró del 3 al 6 de marzo en Denver.

PRUEBAS DE INFECCIÓN A LARGO PLAZO

Al principio de la pandemia, se pensaba que la Covid-19 era una enfermedad transitoria. Sin embargo, un número cada vez mayor de pacientes, incluso los que antes estaban sanos, siguieron presentando síntomas, como niebla cerebral, problemas digestivos y vasculares, durante meses o incluso años.

Los investigadores analizaron muestras de sangre de 171 personas infectadas por Covid. Utilizando una prueba ultrasensible para detectar la proteína 'espiga', que ayuda al virus a penetrar en las células humanas, los científicos descubrieron que el virus seguía presente hasta 14 meses después en algunas personas.

Entre quienes fueron hospitalizados por Covid, la probabilidad de detectar los antígenos del Covid era aproximadamente el doble que entre quienes no lo fueron. También era mayor para los que declararon estar más enfermos, pero no fueron hospitalizados.

"Como médico, estas asociaciones me convencen de que tenemos algo entre manos, porque tiene sentido que alguien que haya estado más enfermo de Covid tenga más antígenos que puedan permanecer", afirma Peluso.

EL VIRUS PERSISTE HASTA DOS AÑOS EN LOS TEJIDOS

Dado que se cree que el virus persiste en los reservorios tisulares, los científicos recurrieron al Banco de Tejidos de Covid Larga de la UCSF, que contiene muestras donadas por pacientes con y sin Covid larga.

Detectaron porciones de ARN viral hasta dos años después de la infección, aunque no había pruebas de que la persona se hubiera reinfectado. Lo encontraron en el tejido conjuntivo donde se encuentran las células inmunitarias, lo que sugiere que los fragmentos víricos estaban provocando el ataque del sistema inmunitario. En algunas de las muestras, los investigadores descubrieron que el virus podía estar activo.

Peluso ha señalado que es necesario seguir investigando para determinar si la persistencia de estos fragmentos hace que la Covid se prolongue y provoque riesgos asociados como infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares.

Pero, basándose en estos hallazgos, el equipo de Peluso en la UCSF participa en múltiples ensayos clínicos que están probando si los anticuerpos monoclonales o los fármacos antivirales pueden eliminar el virus y mejorar la salud de las personas con Covid larga.

"Hay mucho más trabajo por hacer, pero creo que estamos avanzando en la comprensión real de las consecuencias a largo plazo de esta infección", afirma Peluso.