MADRID 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las personas que toman cannabis medicinal para el dolor crónico tienen un riesgo ligeramente mayor de sufrir arritmia, según una investigación de la Sociedad Europea de Cardiología, publicada en el 'European Heart Journal'.
El consumo recreativo de cannabis se ha relacionado con enfermedades cardiovasculares, pero se han realizado muy pocas investigaciones sobre los efectos secundarios del cannabis medicinal. Los investigadores dicen que el nuevo estudio es importante ya que hay un creciente número de países permiten ahora el cannabis medicinal como tratamiento para el dolor crónico.
De hecho, el cannabis medicinal ahora está permitido como tratamiento para el dolor crónico en 38 estados de EEUU, así como en varios países de Europa (como España, Portugal, los Países Bajos y el Reino Unido). El estudio fue dirigido por el doctor Anders Holt del Hospital Universitario de Copenhague - Herlev y Gentofte en Dinamarca.
Incluía datos de 5.391 pacientes daneses a quienes se les había recetado cannabis para el dolor crónico. Esto incluía a personas con dolor en los músculos, articulaciones o huesos, personas con cáncer y aquellas que padecían dolor en los nervios. Los investigadores compararon este grupo con 26.941 pacientes que también padecían dolor crónico pero que no recibían cannabis como tratamiento.
Los datos mostraron que los pacientes que recibían cannabis medicinal tenían un riesgo del 0,8% de ser diagnosticados con arritmia que requería seguimiento y posible tratamiento dentro de los 180 días posteriores a la recepción del cannabis. Este riesgo era más del doble que el de los pacientes con dolor crónico que no consumían cannabis. La diferencia de riesgo entre los dos grupos se había reducido cuando los investigadores observaron el primer año de tratamiento.
Los pacientes que tomaban cannabis de 60 años o más y los que ya habían sido diagnosticados con cáncer o enfermedades cardiometabólicas, como enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y diabetes, tuvieron los mayores aumentos en el riesgo de arritmia.
El estudio no mostró ningún vínculo entre el consumo de cannabis medicinal y el riesgo de síndrome coronario agudo, que incluye ataque cardíaco y angina inestable, accidente cerebrovascular o insuficiencia cardíaca.
Según los investigadores, el objetivo de este trabajo no es que los pacientes con dolor crónico se abstengan de probar el cannabis medicinal si otros tratamientos han sido inadecuados. Sin embargo, estos resultados sugieren que inicialmente puede ser aconsejable mejorar la monitorización, especialmente en pacientes que ya tienen un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.
"Necesitamos mucha más investigación en esta área. Antes de concluir nada, los resultados de este estudio deberían replicarse en otros países y entornos. También sería interesante comprender si existe algún vínculo entre el consumo prolongado de cannabis y la insuficiencia cardíaca, el accidente cerebrovascular o el síndrome coronario agudo. Ésta sería un área importante a aclarar, ya que el dolor crónico puede persistir durante muchos años", concluyen.